El nuevo intento de los socios parlamentarios del Consell para implantar la tasa turística en la Comunidad en el año 2018 se quedará en saco roto. El Consell mantiene el veto al impuesto turístico que Podemos le reclama y que le pide formalmente en la enmienda a la Ley de Acompañamiento de las cuentas del año que viene que registrará hoy para su debate parlamentario y que sitúa la tasa turística en un máximo de 3 euros por pernoctación. La medida será rechaza porque es «precipitada» y porque en el sector todavía no lo ven claro, según indicaban ayer fuentes de la Conselleria de Hacienda. El gobierno valenciano ya fijó su postura en este asunto, que llegó a generar diferencias dentro de el propio PSPV, porque mientras cargos socialistas no la veían con buenos ojos -como el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer- otros apuntaban hacia una tasa municipal una vez abierto el debate que forzó Podemos para ganar visibilidad. El grupo parlamentario morado presentará hoy mismo una enmienda a la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para 2018 en la que pedirán la inclusión de la tasa turística en la Comunidad, con carácter finalista, que se aplicaría sobre el alojamiento y contemplaría un tramo autonómico fijo de hasta dos euros y otro municipal variable y que decidirían las propias localidades si quieren esta esblecer.

Con esta tasa, la formación morada prevé que se lleguen a recaudar entre 30 y 40 millones anuales con el tramo autonómico. Así lo explicó el portavoz de economía de Podemos, David Torres, en rueda de prensa, en la que estuvo acompañado por la Secretaria de Programas y Políticas Públicas, Rocío Segura, y en la que detalló su propuesta para la implantación de esta tasa. Torres, que es quien ha defendido la propuesta ante las Cortes, explicó que el impuesto sería finalista y sus ingresos deberán ir destinados a la mejora de los servicios de los que disfrutan los turistas. Según la enmienda, a la que ha tenido acceso este diario, la tasa se aplicaría a través de dos tipos de tramo -uno autonómico que será fijo y otro municipal variable- y se pagará dependiendo del tipo de establecimiento y durante los 10 primeros días de estancia. Así, en hoteles de cinco estrellas, cinco estrellas de lujo y cuatro estrellas superior, Podemos plantea que en el tramo autonómico se pague dos euros y en municipal hasta un euro; en hoteles de cuatro y tres estrellas superior en el tramo autonómico se pagaría 1,5 euros y 0,75 en el municipal y en hoteles de una, dos y tres estrellas en la parte autonómica se pagaría un euro y en el tramo municipal 0,50 céntimos. También regula los campings y los hostales. David Torres criticó la «deslealtad» de la Agencia Valenciana de Turisme, con Francesc Colomer al frente, no solo por no impulsar la tasa, sino por no querer «abrir el debate» y ponerlo sobre la mesa. Según las cifras que maneja Podemos, y que coincidían con las que llegó a barajar Hacienda, la tasa aumentaría los recursos al turismo con el tramo autonómico entre 30 y 40 millones de euros.