La nueva radio pública valenciana comenzó ayer a emitir en pruebas, con una programación compuesta por música en valenciano y cuñas con lemas como «Sóm À Punt, la ràdio i hem vingut a escoltar-te» y «À Punt, la ràdio autonòmica». La primera emisión se llevó a cabo por sorpresa y sin anuncio previo y el objetivo principal fue comprobar cuestiones técnicas que permitan la calidad de la emisión. El anuncio del arranque de las emisiones se realizó a través de las redes sociales. Los alicantinos podrán escuchar À Punt radio en el dial 96.5 de la FM. El resto de diales en los que se podrá oír la emisora pública autonómica son el 102.2 de la FM para los que estén en València y el 102.7 para los vecinos de la provincia de Castellón.
Según informó la Corporación Valenciana de Medios de Comunicación, las emisiones, que incluyen música e indicativos, servirán para hacer «las comprobaciones técnicas de la emisión previas al inicio definitivo de las mismas con el magacín presentado por la periodista Jèssica Crespo en diciembre». La directora general de À Punt, Empar Marco, anunció a principios de este mes que la radio del nuevo medio de comunicación público valenciano arrancaría sus emisiones en diciembre, con una programación reducida de un magacín matinal de tres horas y otras propuestas similares, pero sin informativos.
Por lo que respecta a la televisión pública, el objetivo es que comience en el primer trimestre de 2018, aunque la fecha exacta dependerá de que se vayan incorporando profesionales desde la bolsa de trabajo temporal. El proceso de incorporación de profesionales está siendo «lento porque hay muchas personas inscritas en las bolsas de trabajo y el sistema es muy garantista», según la CVMC, mientras que precisamente las asociaciones de periodistas han llamado la atención sobre el proceso de selección. A finales de este mes se cumplen cuatro años desde el apagón de la extinta Radio Televisió Valenciana, que comenzó el 28 de noviembre por la noche por la radio y culminó a las 12.19 horas del 29 de noviembre con el fundido a negro de las emisiones televisivas.
