Los convocantes de la manifestación del 18 de noviembre por una financiación justa para la Comunidad Valenciana dejaron claro ayer que existe el «problema valenciano, no solo Cataluña» y que su intención es dar «visibilida» a la falta de inversiones que sufren los ciudadanos y las empresas. Así lo manifestó el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, junto a los secretarios generales de CCOO PV y UGT-PV, Arturo León e Ismael Sáez, respectivamente, en una rueda de prensa en la que afirmaron que el 18N marcará «un antes y un después» en las inversiones que llegan y tendrá «un gran respaldo». Los convococantes advirtieron que en la marcha del próximo sábado no serán bienvenidos los que acudan con un lema distinto al unitario y que no les gustaría que se «instrumentalizara» la protesta.