La Delegación del Gobierno en la Comunitat Valenciana ha asegurado hoy que el Cuerpo Nacional de Policía ha abierto una investigación sobre la protesta ultra que ayer por la tarde acabó con agresiones poco antes de la marcha por el sí al valenciano en la plaza de San Agustín y la avenida del Oeste de València.

La tensión se disparó cuando una manifestación en la que participaba la Cup y Arran se dirigía a unirse a la convocatoria oficial en defensa de la lengua. Frente a ellos había un gran número de contramanifestantes entre los que se encontraban Yomus y miembros de España 2000. También fue posible ver entre los asistentes al presidente de la Interagrupación de Fallas, Jesús Hernández Motes, y a su número 2, Pedro Pons, vicepresidente de la agrupación.

Pese a que la Policía Nacional intentó separar a ambos bandos para evitar agresiones, finalmente el cordón policial se quedó corto y se desató la violencia.

"Condeno esas agresiones", ha dicho el delegado hoy durante la presentación del dispositivo de policía para la seguridad de la Volvo Ocean Race. A su juicio, debe "erradicarse" la presencia de "cualquier grupo violento extremista" y luchar "contra las radicalidades".

"Mi mayor condena a este tipo de comportamientos", ha asegurado Moragues preguntado sobre el dispositivo de seguridad que se implementó y del que ha destacado que contó con un centenar de agentes desplazados desde fuera de la capital valenciana.

"Hemos abierto una investigación para tratar de identificar a los autores de estas agresiones y esta investigación contará con las unidades de Información de la Policía Nacional y con el visionado de imágenes", ha anunciado.

Juan Carlos Moragues ha explicado que había una manifestación "autorizada", convocada por la Comissió 9 d'Octubre, "a la que se le unió 300 personas de la CUP, un grupo independentista, que se sumó a los 700 de la Comissió. Con lo que al inicio en la plaza de San Agustín había 1.000 personas".

Frente a ellos, el delegado del Gobierno ha señalado que había una concentración "muy importante y no autorizada" de grupos de extrema derecha "en un punto cercano" y que la Policía Nacional acordonó a los grupos de extrema derecha y a los independentistas y que los enfrentamimientos se produjeron con "carácter previo" y en "calles aledañas".

Dimisión

Moragues ha pedido trasladar un mensaje de "sensatez" y de "tranquilidad" porque la sociedad valenciana está "muy tensionada social y políticamente" por el proceso catalán y ha apelado a "todos los dirigentes" políticos a "distensionar" y para que sus declaraciones "sean sensatas" y que "en ningún caso" se agite "la crispación".

Por ello, cuestionado por las peticiones de partidos como Compromís, EUPV o Podemos en las que se solicita su dimisión, Juan Carlos Moragues ha apuntado que ha hecho una reflexión sobre "qué podría haber hecho mejor" ayer y ha desgranado que había una manifestación autorizada, la de la Comissió, a la que se sumaron los independentistas de la CUP; y que frente a ella, había una concentración no autorizada de la extrema derecha.

"Y se tuvo en cuenta y se acordonaron para que no hubiera enfrentamientos", ha subrayado y ha destacado que la actuación policial es "de agradecer" y ha esperado que la Comissió del 9 d'Octubre así lo reconozca "porque velaron por su integridad física".

"Ahora mismo es muy importante sensatez, diálogo y que no se produzca el efecto contagio de lo que está sucediendo en Cataluña en la Comunitat Valenciana", ha seguido.

Sin heridos

El delegado del Gobierno ha afirmado que "no consta" que haya heridos por las agresiones y ha destacado que se "preservó la seguridad y la integridad física de los manifestantes y su derecho". Asimismo, ha desvelado que se mantuvo en contacto con la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, y con el director general de Seguridad, José María Ángel, y "con el convocante, que era UGT".

"No me consta que haya heridos, es verdad que en las imágenes hay algún enfrentamiento, pero no hubo cargas policiales; y los enfrentamientos puntuales fueron previos a la manifestación que transcurrió dentro de la tensión con normalidad y sin altercados destacables", ha insistido.

Por ello, ha felicitado a la Policía por "el excelente trabajo que se hizo" para garantizar la manifestación y que durante su desarrollo "no hubiese enfrentamientos" y que finalizase en la Porta a la Mar "de forma adecuada" y "de acuerdo con los organizadores" y que el manifiesto se leyó con un megáfono de un coche policial.

Interrogado por la ausencia de detenidos, Moragues ha defendido que ayer "lo principal" era que la manifestación "transcurriese con normalidad" y que, además, "no se puede poner un policía en cada esquina de València".