? Tras la acalorada primera sesión parlamentaria, preludio de lo que se avecina para el nuevo curso político, se reunió ayer la junta de síndics en las Cortes para decidir el modelo de debate de política general que regirá la próxima semana esta cita parlamentaria en la que el presidente de la Generalitat da cuenta del trabajo del Ejecutivo. Encima de la mesa estaba la posibilidad de que el debate dejara de consistir en 48 maratonianas horas repletas de interpelaciones y resoluciones.

Sin embargo, no salieron adelante ninguna de las dos ideas planteadas: que se espaciara con 24 horas intermedias cada una de las dos sesiones, y que se limitaran las propuestas. Fue el PP el que se opuso a ello, por lo que ante la falta de unanimidad fue imposible sacarlo adelante. Así que toca otro debate de locura .