La enésima batalla entre la Generalitat Valenciana y la Diputación de Alicante parece que tendrá como telón de fondo las subvenciones procedentes de la Unión Europea, sobre todo cuando a partir del inicio del nuevo curso político ambas instituciones buscarán el liderazgo por la llegada de los recursos europeos a los pequeños ayuntamientos. En su continuo enfrentamiento y en el papel de contrapeso gubernamental que intenta ejercer la institución provincial ante la Generalitat Valenciana, ambas instituciones activan sus planes estratégicos en la captación de subvenciones europeas para repartir entre los pueblos.
El director general de Administración Local de la Generalitat, Antoni Such, acusó ayer a la Diputación de Alicante de ser competidora de sus propios municipios al poner en marcha una oficina especializada para la captación de fondos europeos destinados a proyectos comarcales y que canalizaría la propia institución provincial.
Para Such, la Diputación hace «competencia a sus propios ayuntamientos» en vez de estar asesorándolos, indica, para que sean ellos mismos los que accedan a los recursos europeos. «La Diputación de Alicante juega a ser una pequeña Generalitat y más valdría que trabajara asesorando a los municipios», señaló Such. Así se refirió al impulso que la Diputación de Alicante quiere darle a la captación de fondos europeos, para lo que ha creado una oficina especializada en la que ha puesto a trabajar -con formación incluida- a diez funcionarios, dos asignados a la oficina y otros ocho distribuidos entre la plantilla con el fin de obtener subvenciones para proyectos comarcales, aunque también municipales.
En plena andadura de la Oficina Provincial de Fondos Europeos de la Diputación el Consell lanzará 27,5 millones de euros provenientes de los fondos europeos para los municipios de la Comunidad Valenciana. Antoni Such anunció ayer a preguntas de este diario que durante el próximo pleno del Consell o en el segundo a lo más tardar -es decir, en la primera quincena del mes de septiembre- el ejecutivo valenciano aprobará la orden para lanzar la convocatoria de la segunda fase del Fondo de Cooperación Municipal, constituida por las líneas de participación en el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) a través de programas y líneas de financiación comunitaria destinados a municipios de menos de 20.000 habitantes, un documento que actualmente está en fase de alegaciones.
Así, el Consell lanzará en cuestión de días la convocatoria de 20 millones de euros para la rehabilitación de patrimonio turístico y cultural y otros 7,5 millones para planes de movilidad urbana (por ejemplo la construcción de carriles para bicicletas) y otros que supongan un freno a la contaminación. Esta convocatoria, a la que podrán concurrir ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes y que deberán sufragar el cincuenta por ciento de sus proyectos, ha sido llamada por la Generalitat como la «segunda fase» del Fondo de Cooperación Municipal. La primera fase consistió en el reparto de un fondo incondicionado de 80 millones con la cofinanciación de las diputaciones, una fórmula a la que se negó la Diputación alicantina, la única que no aportó su parte.
