La presidenta de los populares valencianos, Isabel Bonig, desveló ayer que ha negociado el cambio de modelo de financiación con comunidades gobernadas por el PP que podían tener «afinidad con la Comunidad» y que por ello el PP «ha hecho los deberes». Por ello, tras asistir a un encuentro con afiliados y militantes del PP de Xàtiva dijo que sabe que cuenta con el apoyo del PP para trabajar en los órganos institucionales. Sin embargo, criticó que la manifestación que se baraja en torno al 9 de octubre por un cambio del sistema «es un instrumento más de Oltra, de Compromís y Podemos para tapar su radicalidad y su falta de gestión». Destacó que el PP ha estado «negociando y hablando» con comunidades afines y que estas conversaciones no las había hecho públicas hasta ahora porque «entraba dentro de las relaciones institucionales y de ese apoyo». En ese sentido recordó que el PPCV firmó a favor de una nueva financiación, pero que donde se cambia el modelo es en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) y después con votos en el Parlamento para modificar la Ley orgánica de financiación de las comunidades autónomas. «Por ello el PP no estará detrás de las pancartas y en la radicalidad y hasta los empresarios de la CEV dicen que no estarán».

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, dijo al respecto que se utilizarán todos los canales posibles, el institucional y el del diálogo, «pero también nos hemos de hacer escuchar, en una manifestación o mediante cualquier otra actuación en favor de que se resuelva el problema valenciano».

El portavoz del PSPV en las Cortes Valencianas, Manolo Mata, dijo que Bonig está «obligada a decir qué, cómo, cuándo y con quién negocia sobre el mayor problema que tiene esta Comunidad».