Ciudadanos, como era un secreto a voces desde hace días, va a terminar también roto en las Cortes Valencianas. Cuatro diputados que hasta ahora militaban en la formación de Albert Rivera, encabezados por Alexis Marí, empezarán a tramitar hoy mismo su salida del grupo parlamentario. Junto a Marí abandonarán también la disciplina «naranja» David de Miguel, Domingo Rojo y Alberto García que, de esta manera, acabarán por engrosar la bancada de los tránsfugas en el hemiciclo autonómico. Alegarán su discrepancia absoluta con la decisión de Ciudadanos de avalar en Madrid los presupuestos generales del Estado de Mariano Rajoy, que discriminan en el reparto a la Comunidad Valenciana y también a la provincia de Alicante.

Como se recordará, tras la asamblea de Cs en Madrid, la formación fue preparando el camino para el relevo como portavoz de Alexis Marí, casado con la eurodiputada Carolina Punset, una de las dirigentes críticas también con Rivera. La decisión de Marí de sumarse al frente común promovido por el presidente de las Cortes, Enric Morera, para censurar las cuentas del Gobierno de Rajoy desembocó hace unas semanas en su destitución como síndic en las Cortes Valencianas y su sustitución por la alicantina Mari Carmen Sánchez. Los parlamentarios críticos contaban con arrastrar a algún diputado más al grupo de no adscritos pero, finalmente, serán cuatro los que se marchen de Ciudadanos con el acta para convertirse en tránsfugas. El banco de los no adscritos estará formado por seis diputados: cuatro procedentes de Cs, uno apartado del PP y la alicantina Covadonga Peremarch, elegida en las listas de Podemos.

Ciudadanos se quedará con nueve diputados y se convertirá, sin contar a los no adscritos, en el grupo parlamentario más reducido del actual hemiciclo autonómico con 9 escaños. Eso sí, su voto continuará siendo decisivo, por ejemplo, para la importante modificación de la ley electoral, que puede finalizar aplicando la rebaja del listón al 3% y con la circunscripción única para toda la Comunidad, de acuerdo con los movimientos que se están produciendo en las últimas semanas. La tensión interna en Ciudadanos se había disparado. Era una evidencia desde hace semanas que el grupo acabaría fracturado en dos mitades. Fuentes conocedoras de la situación de ruptura interna de Cs apuntaron que el pase podría tener efectos a partir del 30 de junio con lo que en el pleno de las Cortes que se celebrará en la primera semana de julio, los cuatro diputados ya se sentarían en su nueva ubicación del hemiciclo.

El grupo de diputados leales a Alexis Marí -uno de los dirigentes que aterrizó en el partido de Albert Rivera procedente de UPyD- también mantenía notables diferencias con la cúpula de su formación después del giro a la derecha que se registró en el último congreso de Ciudadanos. El hasta ahora síndic naranja era más partidario de políticas con un cierto toque progresista e, incluso, se había alineado con los socios del Botànic en múltiples ocasiones. Hoy mismo los cuatro parlamentarios críticos tienen previsto anunciar su hoja de ruta con una comparecencia en las Cortes Valencianas.

Grupos divididos y fracturados que evidencian la crisis

La fractura de los grupos institucionales de Ciudadanos es generalizada en el conjunto de la Comunidad Valenciana. Ya se produjo la marcha de Fernando Sepulcre en la Diputación y en el Ayuntamiento de Alicante; y de José Enrique Aguar en la Diputación de València. Cs es el partido con más tránsfugas de todos los que se presentaron a las últimas elecciones municipales y autonómicas. Suma la baja de 27 cargos públicos municipales y ahora de cuatro de los trece parlamentarios que logró cosechar en las Cortes Valencianas.