Los tres candidatos de Podemos a la secretaría general en la Comunidad, Fabiola Meco, Antonio Estañ y Pilar Lima, han desgranado su proyecto para el partido en la II Asamblea Ciudadana Valenciana que se está celebrando hoy en el Polideportivo del Cabanyal. Los tres han atacado con dureza al PP y han reivindicado el papel que ha de desempeñar Podemos en los próximos años para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.

La primera en intervenir ha sido la síndica adjunta del partido en las Cortes, Fabiola Meco, de la corriente "Més morat més Podem". Durante su intervención, Meco se ha mostrado indignada por los índices de pobreza de la Comunidad y ha reivindicado el papel que ha desempeñado la actual dirección, aunque sin mencionar a Antonio Montiel explícitamente. "Hemos permitido que la gente acceda a las cuentas públicas. Y en una tierra saqueada hemos defendido que alguien independiente se encargue de prevenir el fraude en cada espacio de gestión pública. Pero no es suficiente. Es el momento de cumplir los sueños de la gente. No hay fórmulas mágicas. Solo será posible si crecemos más. La única varita mágica es el poder de la unidad", ha proclamado.

A continuación ha llegado el turno de la senadora Pilar Lima. Tras recordar las dificultades que ha tenido a lo largo de su vida por ser sorda, ha lamentado que el partido se "haya vuelto endogámico" en la Comunidad y ha centrado parte de su discurso a nivel nacional. La aspirante, por otro lado, ha atacado al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, al propiciar la caída de Pedro Sánchez y que posteriormente hubiera un gobierno del PP. "El señor Puig no ama al pueblo valenciano. No ha permitido un gobierno de cambio a nivel estatal", ha afirmado.

El último en intervenir ha sido Antonio Estañ, el más aplaudido a lo largo de la jornada. "No podemos seguir siendo una fuerza subalterna ni una sucursal. Podemos tiene que ser el motor de la calle", ha sentenciado. Al igual que Lima, Estañ también se ha acordado de Puig: "El pueblo valenciano no se puede olvidar quién le entregó el gobierno a Rajoy".