Isabel Bonig quiso realizar ayer un guiño al empresariado valenciano durante su discurso en la clausura del congreso regional. La también síndica popular en las Cortes defendió la importancia de la colaboración público-privada, puso en valor a los pequeños empresarios y censuró la política que está impulsando la Generalitat de la mano del PSPV y Compromís. «El sector privado no es el enemigo, sino un compañero con el que hay que trabajar de forma leal para ayudar a la gente. No se puede mantener lo público arruinando lo privado. Por eso necesitamos a todos los empresarios, especialmente a los pequeños, a los que trabajan todos los días», subrayó la presidenta.
Paradójicamente, ningún representante del sector empresarial de la Comunidad se dio cita ayer en el Palacio de Congresos de València pese a que acudió hasta el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Entre la retahíla de nombres que leyó Esteban González Pons al inicio del acto de ayer no figuraba ningún dirigente empresarial. El que sí estuvo fue el síndic del PSPV en las Cortes Valencianas, Manuel Mata, al que tanto González Pons como Bonig quisieron agrader su presencia.
