El Consell del Botànic que pregona austeridad la aplica también en primera persona. Ni el presidente, Ximo Puig, ni mucho menos la vicepresidenta, Mónica Oltra, ni el resto de consellers declaran grandes patrimonios inmobiliarios ni activos financieros especialmente llamativos.

Sólo el responsable de Hacienda, Vicent Soler, catedrático de Economía y decano de facultad, declara un patrimonio por encima del resto del Consell. Soler y el conseller de Educación, Vicent Marzà, son los que disponen de un más propiedades, mientras que la vicepresidenta y la consellera de Sanidad, Carmen Montón, son las que acumulan más deudas. La lideresa de Compromís tiene que hacer frente a una hipoteca de 174.000 euros. Es titular de una vivienda en València valorada en 40.866 euros y comparte otra propiedad en Riba-roja con un valor catastral de 48.954.

La vicepresidenta declara incluso un coche, en concreto un Seat Córdoba, valorado en poco más de 500 euros, además de un Zafira que no llegaría a los 4.000.

Los datos figuran en el Diari Oficial de la Generalitat, que ayer publicó las declaraciones de actividades, bienes, intereses y rentas de los altos cargos del Consell y responsables de las empresas dependientes de la Generalitat.

Por su parte, Montón (PSPV) comparte la mitad de tres propiedades, dos en Burjassot y otra en Madrid, ésta última valorada de 112.458 euros, pero tiene un préstamo hipotecario suscrito por valor de 249.822, según la declaración de la titular de Sanidad.

Además, el conseller de Hacienda, Vicent Soler, también socialista, es uno de los tres integrantes del gobierno valenciano, junto con el titular de Educación, Vicent Marzà (Compromís) y la de Justicia y Reformas Democráticas, Gabriela Bravo, (PSPV) que no declaran deudas.

El de Hacienda es también el que más patrimonio acumula con cuatro propiedades en València y una en Xàbia y 329.891 euros en cuentas, acciones y seguros.

Conselleras con casa en Madrid

La otra consellera, junto a Montón, que tiene residencia en Madrid también tiene que hacer frente a una hipoteca importante (105.447 euros), que es prácticamente la misma cantidad que tiene el valor castastral de su vivienda, 106.750 euros en la capital.

También el conseller de Transparencia, Manuel Alcaraz, que declara que dispone de 136.856 euros en sus cuentas bancarias arrastra una hipoteca, en este caso de 12.171 euros. El único patrimonio del titular de Transparencia, que es profesor, es la mitad de una vivienda en Alicante.

Por su parte, Gabriela Bravo es propietaria única de una vivienda en València y de la mitad de otra en la capital, cuyo valor catastral es de más de 90.000 euros; además de acumular 16.300 euros en cuentas o acciones .

Por su parte, la consellera de Infraestructuras, María José Salvador, es propietaria de una vivienda en la Vall d'Uixó valorada en 39.497 euros, tiene 64.512 euros en sus cuentas y debe 85.136 de un préstamo hipotecario.

Por lo que respecta al conseller de Economía, Rafael Climent, es propietario de la mitad de dos viviendas, una en Muro d'Alcoi, localidad de la que ha sido alcalde, y otra en Agres, valoradas en 68.000 euros, tiene 14.104 euros en sus cuentas y debe 6.386 euros.

Girona, el más acaudalado

Mientras, por lo que respecta al segundo escalón y a los miembros del sector público valenciano el secretario autonómico de Cultura, Albert Girona, es el alto cargo con más propiedades en su poder. El exalcalde de Almussafes, declara tener participación en hasta seis inmuebles, con un valor catastral superior a los 700.000 euros, además de activos bancarios por encima de los 200.000 euros. Además acaba de recibir una herencia. En el polo opuesto aparece el secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu, que desde el pasado verano está al frente de la política de Empleo. Nomdedéu sólo tiene en el banco mil euros, pero sin deudas ni más patrimonio. Tampoco el secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer, disfruta de una mejor situación y también se sitúa a la cola entre los altos cargos con más patrimonio o rentas. En su declaración no incluye ningún bien, aunque sí una deuda de 68.645 euros por la reforma de la casa de sus padres, en la que afirma residir.

Además, entre los secretarios autonómicos más acaudalados, según la recopilación de la agencia Efe a partir de los datos oficiales, figura también el número dos de Agricultura, Francisco Rodríguez Mulero, que declara propiedades inmobiliarias por 367.764 euros, un capital cercano a los 160.000 euros y una deuda de 103.000; y también la de Economía, Blanca Marín, que declara 95.000 euros en bienes inmuebles, 211.749 euros.

El delegado en Bruselas, Joan Calabuig, tiene 116.395 euros euros en propiedades aunque adeuda en total de 146.029 euros.