El Tribunal de Cuentas ha condenado al exconseller popular Rafael Blasco, dos de sus directos colaboradores -el subsecretario autonómico Alexandre Catalá y el ex director general de inmigración y Cooperación Josep Maria Felip- y el presidente de la Fundación Cyes, Marcial López, a devolver un total de 161.020,18 euros defraudados en la concesión de ayudas de la Conselleria de Solidaridad. En el mismo fallo -que puede ser recurrido- el Tribunal de Cuentas también condena a Marc Llinares, ex jefe de área de Cooperación al Desarrollo, como «responsable contable directo y solidario por la cantidad de 64.000 euros». La trabajadora de la Fundación Cyes y pareja de Marcial López deberá pagar otros 12.881 euros. Y, por último, el empresario Augusto César Tauroni también deberá devolver a las arcas públicas un total de 40.255 euros, según la sentencia.

Todas estas cantidades han sido reclamadas por la Abogacía de la Generalitat, apoyada por la Fiscalía Anticorrupción de Valencia, a través del Tribunal de Cuentas tras confirmar el Supremo la condena a la mayoría de los implicados en la primera pieza del Caso Blasco juzgada en el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV). Curiosamente el reintegro del dinero defraudado también se exige a Josep Maria Felip y Marc Llinares, absueltos por el Supremo. El Tribunal de Cuentas asegura, al respecto, que su competencia es «la jurisdicción contable» por lo que «puede ser exigible la responsabilidad» tanto a Felip como Llinares «por el daño que se produjo en los fondos públicos» por parte de los gestores de los mismos.

En concreto, el Tribunal de Cuentas considera «gravemente negligente» la conducta de Marc Llinares ya que avaló la deficiente documentación presentada por la Fundación Cyes a una subvención destinada para un máster que nunca se hizo. De ahí que se le reclamen sólo el dinero defraudado en esta ayuda. Sobre Felip, el tribunal contable asegura que su conducta también fue «gravemente negligente» al dar el visto bueno a las tres subvenciones concedidas a Cyes para cursos que nunca se realizaron. Es la misma actitud que el Tribunal de Cuentas achaca a Blasco: «Omitió las prevenciones exigibles y dio lugar a la salida de dinero que perjudicó a los fondos públicos».