«En aquest país la pluja no sap ploure». El verso de Raimon -sin citarlo- sirvió a Ximo Puig para recordar las inundaciones recientes en la Vega Baja. Si el año pasado los homenajes fueron a Max Aub y Vicent Andrés Estellés, el protagonismo en esta ocasión fue todo para Miguel Hernández, un« pastor que era un poquito poeta», en cuya casa en Orihuela se grabó el mensaje. Este fue precedido por unas imágenes del jefe del Consell entrando en el inmueble, mirando una fotografía del autor y observando la higuera bajo la que escribía en ocasiones.

Producción

El mensaje fue grabado por Vórtice, una productora formada por extrabajadores de RTVV, mientras la nueva vuelve a no llegar a tiempo. Quizá 2017. El rodaje, el pasado martes, atrajo a numerosos vecinos, encabezados por el alcalde. Un cierto aire a Bienvenido Mr. Marshall. Hubo que cerrar la puerta de la casa al final por el ruido ambiente.

Los partidos reaccionaron ayer sin demora. «Los valencianos no pueden tener un president que reconoce abiertamente que después de casi dos años al frente del Consell no haya hecho nada por sus ciudadanos», afirmó la presidenta del PPCV, Isabel Bonig.

La visión del portavoz en Cortes del PSPV, Manolo Mata, es opuesta: «El discurso de Fin de Año refleja el esfuerzo de Puig por unir a los valencianos y visibilizar en Madrid los problemas de la Comunidad».

También la de Compromís. «Coincidimos en poner en valor lo que representa el Consell. Un gobierno que ha cambiado las mangarrufas del PP por la honradez», dijo Fran Ferri.

Para Alexis Marí (C's), 2016 ha sido «el año de la creación de agencias y organismos para tapar la falta de gestión del Consell».