Ayer Compromís volvió a sufrir la pérdida de un alto cargo, la tercera en apenas seis meses. A la secretaria autonómica de Salud Pública, Dolores Salas, y a la directora general de Internacionalización, Mònica Cucarella, se une ahora el cese voluntario de Sandra Casas, que aunque no milita en la coalición, fue nombrada por ella. La hasta ahora secretaria autonómica de Servicios Sociales y Autonomía Personal formalizó este viernes su dimisión, que justificó por la «lentitud de la gestión admnistrativa minada por los secuaces que el PP dejó en su herencia», un obstáculo que le «consume la vida», según comunicó la hasta ahora número dos de Mónica Oltra.

La decisión, en palabras de la consellera de Igualdad, se tomó hace dos meses. «Yo la convencí para que se quedara hasta cerrar el año, y así ha sido», detalló tras el pleno del Consell. Oltra achacó la salida de Casas a «motivos personales» y «responsabilidades familiares». «Este trabajo desgasta mucho. Tiene una hija pequeña que los cuatro primeros meses de vida se los pasó entre nosotros», expuso la portavoz del gobierno valenciano, al tiempo que detalló que Casas entró a trabajar apenas 15 días después de dar a luz.

Preguntada sobre si es un buen ejemplo para la sociedad que una alto cargo de la Administración no se acoja al permiso de maternidad, la consellera de Igualdad indicó que fue Casas quien le pidió estar al frente: «Los dependientes no pueden esperar, me dijo», detalló Oltra.

Respecto a la presencia de cargos del PP que «minan» la gestión, la vicepresienta aseveró que «efectivamente» los populares dejaron un sistema que «se está modificando» y que ella también se desespera. «Desgasta mucho ver cómo un decreto tarda una media de seis meses en salir», prosiguió.

En este sentido, Casas lamentó que «se ha cumplido un ciclo, he generado un muevo modelo, un nuevo marco jurídico», pero «mi fuerza, quizás para algunos desmesurada para generar cambio, no coincide con la que veo que van produciéndose los mismos».