PSPV y Ciudadanos pretenden evitar una situación que se ha convertido en normal en la Administración valenciana: que un buen número de funcionarios, los de rango superior, cobren más que los altos cargos del Consell. Solo en la Sanidad pública hay 4.092 empleados que cobran más que el presidente de la Generalitat.

La iniciativa pactada por los portavoces parlamentarios de los dos grupos citados, Manolo Mata y Alexis Marí, respectivamente, propone que las retribuciones de los altos cargos del Consell «no podrán, en ningún caso, ser inferiores a las que tenga derecho a percibir un funcionario de carrera de la Generalitat del grupo A1, con complemento de destino 30, complemento específico E050 y complemento de carrera profesional correspondiente al grado IV de desarrollo profesional». Es la descripción en términos técnicos de un jefe de servicio, según las fuentes consultadas.

La medida, plasmada en forma de enmienda a los Presupuestos de la Generalitat registrada ayer, cuando finalizaba el plazo de presentación, supone en la práctica una subida salarial de todos los altos cargos del Consell, ya que según la tabla retributiva vigente para 2017 solo el sueldo anual del presidente de la Generalitat (68.292,12 euros) está por encima del de un jefe de servicio (61.514,03 euros). Tanto la vicepresidenta como el resto de consellers, y también secretarios autonómicos, subsecretarios y directores generales tienen previstos unos emolumentos inferiores, como puede observarse en la tabla adjunta.

La enmienda de Ciudadanos y PSPV, la única pactada entre ambos grupos entre las más de cien presentadas por los socialistas, no precisa la retribución que deberían tener los altos cargos, sino que «autoriza» al Ejecutivo de Ximo Puig y Mónica Oltra a establecer en el primer trimestre de 2017, aunque a efectos de 1 de enero, el marco retributivo de los altos cargos según el criterio señalado.

La mayoría de las enmiendas de los socialistas a las cuentas de 2017 están acordadas con el socio de gobierno, Compromís, pero no esta. La coalición valencianista adujo la necesidad de debatir en el grupo la iniciativa antes de adoptar una postura. Por lo pronto, evita firmar una medida que suele ser impopular. «A nadie gusta, pero hay que hacerlo», argumentó ayer el portavoz del PSPV, Manolo Mata, a este diario. No obstante, socialistas y C's necesitarán el apoyo de otros grupos en la votación para sacar adelante la propuesta.

Prueba de que este tipo de actuaciones son difíciles de asumir es que el PSPV ya intentó el año pasado en solitario que los fichajes de funcionarios para puestos de alto cargo mantuvieran su sueldo de origen y la medida no prosperó. Ahora, vuelve a incluir esta idea en la segunda parte de la enmienda acordada con el partido de Albert Rivera. Evitar la pérdida de poder adquisitivo de funcionarios se salvaría mediante «un complemento personal por la diferencia retributiva».

Por otra parte, PSPV, Compromís y Podemos presentan una enmienda conjunta para que todos los jefes de servicio de la sanidad pública tengan dedicación exclusiva y no puedan ejercer en otros centros privados.