El presidente de la Diputación de Castelló, Javier Moliner, del PP, no quiere que la institución que preside quede al margen de las decisiones que se tomen desde Valencia o Barcelona, porque a Castelló «le irá muy bien» si se mejoran las conexiones entre las dos ciudades. «Para nosotros y los 135 municipios de la provincial es crucial, nuestra tierra nunca ha entendido de fronteras y siempre ha querido aproximar los dos territorios», señaló.
Mientras, el presidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, visitó ayer Beniarjó, en la comarca de la Safor, para avanzar en la restauración del puente que conecta con Real de Gandia. Tampoco acudió el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez. c. a.
