La pasada semana, el presidente de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar, ejercía de anfitrión en la visita de Mariano Rajoy con motivo de la campaña electoral en Galicia. Una imagen que estuvo marcada por la polémica, ya que el dirigente gallego está investigado -antes imputado- por un delito de cohecho por presuntamente ofrecer trabajo a una mujer a cambio de sexo.

Dentro de tres semanas, Baltar visitará Alicante para participar en un foro organizado por la Diputación con el objetivo de reivindicar su supervivencia y poner en valor su importancia para los pequeños municipios, acallando así las voces críticas que abogan por su desaparición del mapa político.

El dirigente gallego, en concreto, participará en una sesión de la segunda jornada. El 7 de octubre, según el programa que ya está publicado en la página web de la Diputación, Baltar intervendrá en una mesa bajo el titulo «Las Diputaciones como agentes de desarrollo, económico de la provincia», que estará moderada por el vicepresidente de la institución provincial y responsable de Turismo, Eduardo Dolón. En esa sesión también está anunciada la participación del vicepresidente de la Diputación de Málaga, José Francisco Salado. Ambos son dirigentes del Partido Popular, aunque el PSOE -según el citado programa- también participará activamente en el foro «Diputaciones del siglo XXI», que se celebrará los días 6 y 7 de octubre en el ADDA.

Por ahora, dos dirigentes socialistas ya han confirmado su presencia, como son el jiennense Francisco Reyes y el zaragozano Juan Antonio Sánchez Quero. Con todo, seguramente no serán los únicos representantes del puño y la rosa que acudan a la cita, según fuentes de la Diputación de Alicante, que restan importancia a la presencia del imputado Baltar. Aseguran que la institución provincial ha invitado a todos los presidentes de diputaciones, «y Baltar es el dirigente en Ourense», subrayan las mismas fuentes. El presidente de la institución gallega -que «heredó» el cargo de su padre- fue uno de los primeros en confirmar su presencia en el evento que se celebrará en el ADDA.

Al margen de la presencia de Baltar, el morbo estará en la respuesta que llegue desde la Generalitat Valenciana. Según fuentes próximas a la institución, el presidente de la Diputación, César Sánchez, invitó por escrito al jefe del Consell, Ximo Puig, pese a las tensas relaciones que ambos mantienen durante este mandato. También tendrá su dosis de morbo la posible presencia del alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, que no oculta su buena sintonía con el popular César Sánchez ni su habitual enfrentamiento con Puig. El jefe del Consell apuesta por vaciar de poder a las diputaciones -de ahí los decretos de coordinación de turismo y deportes-, a cambio de comarcalizar el territorio.