Una exasesora del grupo popular del Ayuntamiento de Valencia, testigo del caso Imelsa, ha afirmado hoy que no colaboró con los mil euros que se le pidieron para la campaña electoral del PP porque no le gustó el tema y vio "claramente" que era blanqueo de dinero.

Así lo ha declarado a los periodistas la exasesora, que hoy ha acudido a declarar a la Comandancia de la Guardia Civil de Patraix, en Valencia, por el caso Imelsa, que investiga un presunto amaño de contratos a cambio de comisiones ilegales en varias administraciones públicas valencianas y financiación ilegal del partido y blanqueo de dinero en el grupo municipal del PP de Valencia.

La testigo, una de las cuatro personas que se negaron a donar mil euros para colaborar con la campaña electoral del PP, dinero que supuestamente luego se les retornaba en billetes de 500 metidos en un sobre, ha asegurado que el asunto era "turbio" y decidió no colaborar.

"No participé en un delito, hice lo que me dictó la conciencia", ha manifestado a los periodistas a su salida de la Comandancia de la Guardia Civil. Preguntada si por negarse a participar en esa trama, no repitió como asesora, ha respondido que no esperaba seguir en ese puesto, pero ha precisado que ese "no es el tema".

A lo largo de la mañana también ha acudido a declarar ante la Guardia Civil el exconcejal de Educación Emilio del Toro, quien antes de entrar en la Comandancia, ha manifestado que no podía hacer comentarios sobre el pago de mil euros al partido, y que no sabía por qué le han citado como investigado.

Las dependencias de la Guardia Civil han acogido también la declaración, en calidad de investigado, de un arquitecto que, según ha explicado, se encargaba de supervisar el césped artificial que instalaban los ayuntamientos con las subvenciones que recibían de la Diputación de Valencia.

En unas declaraciones breves a los periodistas ha explicado que no conoce nada de la trama ni del supuesto amaño de contratos, y que únicamente supervisaba que botase bien la pelota y que el césped fuese de calidad.

También en calidad de investigados han comparecido hoy el exasesor de la alcaldía de Valencia Antonio Barranco y el periodista Vicent Palasí.

El primero ha explicado a los periodistas que únicamente aportó al partido 60 euros mensuales en calidad de afiliado y que cree en la "inocencia" de la exalcaldesa Rita Barberá y de la secretaria del PP municipal, Mari Carmen García Fuster, para quien el fiscal reclamó prisión preventiva.

Por su parte, Palasí ha indicado que los investigadores de la UCO le habían requerido para que diese explicaciones sobre unos determinados contratos de promoción que firmó con Imelsa hace 6 años.

Como el resto de investigados, ambos han quedado a la espera de ser llamados por el juez instructor del caso.

La anécdota de la jornada la ha protagonizado el alcalde de Valencia, Joan Ribó, que es vecino del barrio de Patraix y reside cerca de la Comandancia de la Guardia Civil, que ha pasado por delante del cuartel a la salida de un supermercado cercano, andando y con dos bolsas de la compra.

Al comprobar el despliegue de cámaras y fotógrafos Ribó ha bromeado al afirmar que él no tiene nada que ver con la investigación y se ha dirigido a los periodistas para desearles "que no sea nada".