El año nuevo habrá aterrizado cargado de buenos propósitos para los ayuntamientos de la Comunidad Valenciana. Sin embargo, las noticias que llegan desde el Ministerio de Hacienda no son tan halagüeñas.
El departamento que dirige, en funciones, Cristóbal Montoro, ha hecho públicas las previsiones de las entregas a cuenta de la participación en los tributos del Estado por parte de los consistorios para 2016. Pese a que la coyuntura actual prevé que siga la mejoría económica, según los datos que se han conocido esta misma semana, el Estado inyectará menos dinero a los ayuntamientos. Del recorte también se verán afectadas las tres diputaciones.
El tijeretazo, según esas previsiones, será de 38,7 millones de euros, lo que en porcentaje supone un 1,9 % respecto a los ingresos del año 2015.
En total, las entidades locales que tributan tanto bajo el régimen general como en el de cesión (capitales de provincia o ciudades que cuentan con más de 75.000 habitantes), así como las corporaciones provinciales de Valencia, Alicante y Castellón, percibirán 1.932 millones de euros del conocido como PIE. El año pasado esa cifra fue de 1.971 millones.
Una mayor parte de ese dinero irá a parar a las arcas de las tres entidades provinciales en su conjunto. La Diputación de Valencia recibirá 408 millones de euros, mientras que Alicante ingresará 230 y Castellón 104, en total, 742 millones y un 38,4 % de todo lo que el ministerio ha calculado para la Comunidad Valenciana este 2016. El año pasado ingresaron 756. Todas ellas, sin excepción, serán víctimas de la tijera en un 1,7% respecto a 2015.
Las ocho ciudades más grandes, Alicante, Elche, Torrevieja, Orihuela, Castellón, Gandia, Torrent y Valencia se repartirán un 29,4 % del total de las entregas, es decir, 569 millones de euros. El año pasado, estas urbes recibieron 582, con lo que la reducción estimada por Hacienda es de 13 millones.
El resto de consistorios, por su parte, cuentan con una previsión de 620,5 millones según los cálculos para este 2016, un 32,1 % del total del pastel a repartir. Esta cifra supone una diferencia de 12 millones de euros menos que el año pasado, cuando el Gobierno entregó 632 millones.
Estas entregas son un adelanto de la financiación estatal y se calcula según la previsión de recaudación para cada ejercicio, es decir, según la estimación que el Estado hace de los ingresos que tendrá este año por IRPF, IVA e impuestos especiales. Para calcular el reparto se tienen en cuenta tres parámetros: población, esfuerzo fiscal y el inverso de capacidad tributaria. Este dinero está incluido en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2016.
Las capitales ingresarán menos
Ninguna de las grandes ciudades valencianas se salva del recorte y eso incluye, como es lógico, las tres capitales de provincia. Valencia se mantiene, de lejos, como la que más fondos recibe con 333,8 millones, un 2,1 % por debajo del año pasado (341). En el ranking le sigue Alicante, con 75,1 millones y un 2,3 % menos que el ejercicio anterior (76,9), luego está Elche. Esta última pasa de 53,9 a 52,6 millones, un 2,4 % menos, mientras que Castellón de la Plana se sitúa en la cuarta posición de la lista de ciudades valencianas con mayores ingresos con 37,2 millones de euros, un 2,6% por debajo de 2015. Tras estas están Torrevieja (18,6 millones), Orihuela, (18,1) Gandia (16,9) y Torrent (16,7).
Por provincias, los municipios de Valencia percibirán 677 millones de euros, otros 116 irán a parar a los de Castellón, mientras que en Alicante se repartirán 394 millones de euros.
