Los dos viajes en yates del empresario Enrique Ortiz a los que estuvo invitado el expresidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, tuvieron un coste superior a los 100.000 euros, según un informe pericial que se ha entregado esta semana en el juzgado de Orihuela que investiga las presuntas irregularidades en la tramitación del Plan Zonal de la Vega Baja y que se enmarca dentro del caso Brugal. Según el sumario, los viajes se produjeron entre el 6 y el 9 de agosto de 2008 y del 27 al 30 de agosto de 2009 y tuvieron como destino las islas Baleares.
El informe había sido encargado a un perito judicial independiente por la magistrada Rosa María Villegas para saber de forma pormenorizada lo que costaría un viaje para seis personas a las Baleares, el hospedaje, los gastos del combustible, el amarre y teniendo en cuenta que sólo se dispuso de un miembro de la tripulación. Este trabajo fue encargado para determinar si los viajes pueden tener consideración de dádivas y por tanto ser susceptibles de ser considerados como un delito de cohecho. Ésta se trataba de una de las últimas diligencias pendientes para cerrar el caso.
El primero de los dos viajes en el yate Elena tuvo lugar entre los días 6 y 9 de agosto de 2008 por la isla de Palma de Mallorca y en él estuvieron el empresario Enrique Ortiz, el entonces presidente de la Diputación José Joaquín Ripoll, así como el también empresario e imputado en la trama Brugal Rafael GregoryRafael Gregory, los tres acompañados de sus respectivas esposas. El informe del perito concluye que el precio del este primer viaje debió ascender aproximadamente a 72.142,58 euros. La mayor parte de esta cantidad corresponde a los gastos del yate, donde se incluye el alquiler, la tripulación el amarre y el hospedaje, y se estima un coste de 21.142,86 euros diarios. El gasto en combustible habría ascendido a 2.214 euros, estimando un consumo de 1.800 litros de gasolina (tres días, con una media seis horas diarias y un consumo de 100 litros por hora). Por último, añade los gastos de alimentación que habrían ascendido a 4.500 euros, partiendo de la base de 250 euros diarios por persona.
El segundo de los viajes tuvo lugar entre el 27 y el 30 de agosto, aunque en esa ocasión no estuvo presente Enrique Ortiz. Según las investigaciones, éste cedió la embarcación Sofía a Ripoll y a Gregory para que fueran desde Dénia a Ibiza, un viaje al que fueron acompañados de sus mujeres y de otra pareja que no tiene nada que ver con el procedimiento. El segundo viaje habría tenido un coste inferior, según el informe pericial. Nuevamente la mayor parte de los gastos se enmarcan dentro del alquiler de la embarcación, que supondrían un total de 6.428,57 euros al día. El consumo de combustible se estima en 4.318,44 euros para el viaje desde Dénia a Ibiza y el regreso al Puerto de Alicante. A estos gastos se sumarían el consumo durante los días de las vacaciones, a los que se sumarían otros 6.111 euros más. Las comidas de los pasajeros se estiman también en 4.500 euros.
El informe ha sido notificado a todas las partes que ahora tienen un plazo de tres días para decidir si impugnan sus conclusiones. Desde que estalló el caso Brugal, José Joaquín Ripoll admitió haber ido a los dos viajes pero ha negado públicamente que éstos fueran contraprestaciones y que ni Ortiz le exigió nada a cambio de estos viajes, ni él tampoco lo pidió.
