El tiempo se acaba para Compromís. Las diferencias internas de la formación sobre el pacto con Podemos están dilatando los contactos, un retraso que juega a favor de los que lo rechazan. A la espera de lo que ocurra mañana en el Consell Nacional del Bloc -muy cohesionado en su negativa al acuerdo- sólo quedará la semana que viene para intentar limar las asperezas que, en estos momentos, son casi insalvables entre ambos bandos. Y todo ello teniendo en cuenta que, de cerrarse la alianza, el documento tendría que registrarse antes del 6 de noviembre una vez que a principios de la próxima semana, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, convoque las elecciones para el próximo 20 de diciembre.
Las posiciones siguen inamovibles. La vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, de Iniciativa, defiende la entente mientras que el titular de las Cortes y secretario general del Bloc, Enric Morera, lo rechaza conforme a la consulta interna que realizó entre sus militantes hace unas semanas. En todo caso, los nacionalistas abrieron ayer la puerta al acuerdo siempre y cuando se puedan sumar más partidos a la operación, algo que los de Pablo Iglesias rechazan. El principal escollo, en estos momentos, continúa siendo la adscripción de los diputados que consiga la coalición a un grupo propio en el Congreso, lo que se podría conseguir sólo en el supuesto de que fuera Compromís la que registrara formalmente la candidatura. Así las cosas, en el supuesto de que no se alcanzara un consenso, finalmente, la marca Compromís sería la que se utilizaría para la cita electoral.
En todo caso, jugando con los plazos legales, habría un margen muy estrecho para realizar una consulta telemática a los afiliados y para celebrar las primarias, aunque es indiscutible el liderazgo de Joan Baldoví para la lista de Valencia. Els Verds, una de las cuatro patas de la coalición, le ofreció apoyo al hasta ahora diputado en el Congreso pero, a la vez, se mostró a favor de la alianza con Podemos para esos comicios aunque también la abrió la puerta a otros formaciones políticas y movimientos sociales. «La propuesta es positiva y generosa al contemplar las reclamaciones que desde Compromís se pidieron para poder establecer el acuerdo», subrayó.
En un comunicado, ha recordado que esos requisitos eran, por ejemplo, la posibilidad de tener un grupo parlamentario propio, encabezar la portavocía y lograr un reparto equitativo de las listas electorales "para asegurar que todas las sensibilidades estén representadas".
El coportavoz de la organización, Julià Álvaro, ha defendido la oportunidad de acuerdo como "la mejor manera de conseguir un cambio político en el estado español al servicio de todos los valencianos", a falta de la ratificación por parte de la militancia. En este sentido, ha defendido que "no puede ser que los prejuicios nos separen de nuestro camino, que siempre ha sido de suma y que esta vez nos puede llevar a ser protagonistas del cambio de modelo político, económico y territorial al estado español".
