Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Tras casi 2 meses

La Diputación se muestra incapaz de cerrar un pacto sobre sueldos y asesores

Ciudadanos se suma a una maniobra de los socialistas para que seis diputados del PSPV accedan a una dedicación

Casi dos meses después de la sesión en la que César Sánchez logró con el voto de Ciudadanos mantener la Diputación para el PP, la institución provincial continúa paralizada. Las propuestas de Sánchez van a remolque de los movimientos del nuevo Consell de izquierdas; los organismos autónomos están atascados por la proporcionalidad de los cinco grupos provinciales en la formación de sus consejos y por extensión en el nombramiento de los ejecutivos de cada entidad; y ni tan siquiera está cerrado un acuerdo sobre el reparto de sueldos y su cuantía o los asesores. Evidencia de la inestabilidad en la que está sumida la institución. Ayer mismo la Junta de Portavoces de la Diputación se volvió a reunir para intentar perfilar un principio de acuerdo sobre todos los asuntos pendientes pero todo se trasladó a una nueva convocatoria para el próximo miércoles.

Para esa fecha, en principio y de acuerdo con la versión del PP, se pondrán en marcha los orgánismos autónomos, hasta ahora pendientes de la nueva configuración del gobierno provincial. La idea de los populares es que el jueves de la próxima semana se celebre, junto al pleno ordinario, otro de carácter extraordinario para desbloquear los nombramientos de todos esos organismos, entre ellos algunos de suma importancia como Suma -el organismo de gestión tributaria de la Diputación-, Proaguas -la empresa pública que ejecuta obras hídricas- o el Patronato de Turismo. En principio, el PP está buscando una fórmula que le permita controlar el día a día de esos consejos.

Para mantener la mayoría, los populares le han concedido a Ciudadanos, su socio de gobierno y con un sólo diputado, presencia en todas las entidades, en las que también estarán los socialistas. Compromís -con tres diputados y más votos que C's- y EU quedan excluidos, por ahora, de parte de esos consejos, una medida a la que sus portavoces, Gerard Fullana y Raquel Pérez, respectivamente, se opusieron de plano. El PP está buscando fórmulas para intentar que se puedan integrar ampliando los organismos en los que ambas formaciones se quedan sin voz ni voto. Pero el acuerdo no está perfilado aún y esos entes que dependen de la Diputación continúan en precario y con un evidente vacío de poder.

Pero es que la reunión de la Junta de Portavoces tampoco alumbró un acuerdo sobre el reparto de las dedicaciones exclusivas. El acuerdo sobre retribuciones que se tomó en el pleno de organización del mes de julio preveía sueldos completos para un grupo de diputados, los del PP con delegaciones, junto a dos de los once con los que cuenta el PSPV en la institución más Fernando Sepulcre de Ciudadanos como muleta de los populares además de los portavoces de Compromís y EU. Todos ya cobran de las arcas provinciales. Restan nueve diputados, siete de los socialistas y dos de la formación de Mónica Oltra, sin ningún tipo de retribución. El portavoz del PSPV en la institución provincial y alcalde de Xàbia, José Chulvi, lanzó hace una semana la propuesta de conceder una dedicación parcial de hasta el 75% del salario a seis de sus diputados, ocupando las vicepresidencias en las comisiones.

Los socialistas presentaron la iniciativa y Ciudadanos se sumó ayer con un planteamiento similar en el que sólo veta que se le conceda un sueldo a Agustín Navarro, imputado por su gestión en el Ayuntamiento de Benidorm. Socialistas y C's negaron un pacto. El PP está dispuesto a ceder si esa entente se extiende al resto de consistorios de la provincia en los que los populares están en la oposición. «Es un pacto por la calidad democrática», explicó Carlos Castillo. El sainete en el que está sumida la Diputación se cierra con la propuesta de sueldos. C's puso sobre la mesa un documento que prevé un sueldo de 67.615 para César Sánchez, menos que Ximo Puig; 57.599 para diputados; y 40.000 para los asesores, lo que supondría una notable reducción para los colaboradores más directos de César Sánchez. El presidente, según fuentes del PP, apuesta por reducirse el salario en un 10%, lo que le dejaría aún por encima de Ximo Puig; el de los diputados en un 5%; y el de los asesores en alrededor de un 3%. Todos seguirán negociando.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats