Marcha atrás del PP. El equipo de gobierno de la Diputación ha decidido rectificar y finalmente aceptará una rebaja salarial para los dirigentes de la institución provincial. Ayer, el mismo día que este diario anunció que la Generalitat iba a remitir una carta a la avenida de la Estación instando a la corporación a bajar los sueldos de manera «voluntaria», fuentes populares confirmaron que esa reducción será efectiva muy pronto. «Se van a bajar los sueldos y la reducción ya se verá reflejada en los Presupuestos de 2016», sentenciaron desde el entorno del presidente, César Sánchez.
Pero, ¿de cuánto será el tijeretazo? Todavía está por determinar. El equipo de gobierno impulsará la creación de una mesa de trabajo en la que estarán representados los cinco grupos -PP, PSOE, Compromís, Ciudadanos (C's) y EU- y en ella se sustanciarán los recortes. «La decisión que se adopte será fruto del diálogo, el consenso y el acuerdo», sentenciaron las mismas fuentes, parafraseando las declaraciones que ha realizado Sánchez durante la semana.
El PP trasladará esa propuesta en la junta de portavoces que se celebrará la próxima semana. Salvo cambio de última hora, el jueves. En ella, los populares propondrán la creación de la comisión, mientras que Compromís y C's pondrán sobre la mesa las suyas. Los primeros en alzar la voz fueron los dirigentes de la coalición. En el pleno de julio presentaron una enmienda para reducir los salarios en un 15%, pero el PP y la formación de Albert Rivera se la tumbaron. El pasado lunes, casi un mes después de aquella sesión plenaria, el que dio marcha atrás fue C's. Anunció que iba a presentar una moción al pleno de septiembre para que ningún diputado provincial pudiese cobrar más que el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. O, lo que es lo mismo, 67.615 euros brutos anuales.
A expensas de ejecutar el tijeretazo, hoy por hoy son 19 dirigentes de la corporación provincial los que ingresan más que el jefe del Consell: César Sánchez (90.000 euros), sus cinco vicepresidentes (75.032,30 euros) y los diputados del PP con competencias, los portavoces de los grupos y la portavoz adjunta del PSOE (68.676,44 euros).
Ante la polvareda que se ha levantado, al PP no le ha quedado otra que recular. Atados de pies y manos por la decisión de C's -su socio en la institución provincial-, los populares reducirán de manera «voluntaria» los emolumentos de los diputados.
La decisión definitiva se produce tras el «tirón de orejas» de la Generalitat. Porque al margen de advertir de que el Ejecutivo autonómico iba a remitir una carta a la Diputación solicitando la reducción de los sueldos, el director general de Administración Local en el Consell, Antoni Such, también adelantó este viernes a INFORMACIÓN que el Gobierno de Ximo Puig está preparando una reforma legal para que ningún diputado provincial supere los emolumentos del propio Puig. «Políticamente me parece impresentable que los diputados provinciales cobren más que el presidente de la Generalitat», zanjó el alto cargo del Ejecutivo.
La rebaja salarial no sólo afectará a los diputados. También golpeará a los cargos designados por los políticos. Es decir, a los asesores. Los dos que más retribuciones tienen asignadas son el director de área de Presidencia y alcalde de Benissa, Juan Bautista Roselló, y el jefe de gabinete de César Sánchez, Antonio Peral. Ambos han conseguido salarios de 64.039 euros brutos al año, sólo 3.600 menos que Puig. Pues bien, tanto Compromís como C's apuestan por reducir esos sueldos. El diputado de la formación naranja, Fernando Sepulcre, ha abogado por que ningún cargo de confianza pueda rebasar la barrera de los 40.000 euros anuales. El tijeretazo, por tanto, está garantizado.
