Lío para empezar en la Diputación. El polémico reparto de asesores y de dedicaciones exclusivas entre los diputados provinciales generó ayer el primer enfrentamiento entre el Partido Popular -que conserva el poder en la institución provincial con 15 actas y el apoyo del único representante de Ciudadanos- y la oposición, integrada, al menos en este inicio de legislatura, por PSOE (11 diputados), Compromís (3) y Esquerra Unida (1). El enfrentamiento tuvo lugar en la Junta de Portavoces, previa al pleno extraordinario y urgente que se celebrará hoy (a partir de las 12 horas, en el Palacio Provincial), cuando se puso sobre la mesa el reparto de asesores y de dedicaciones exclusivas para esta legislatura, que arranca con César Sánchez al frente.
Así, la distribución de los asesores se convirtió en el primer asunto de fricción en el encuentro celebrado en la mañana de ayer, cuando desde Compromís (formación que estuvo representada por José Manuel Penalva y no por su portavoz, Gerard Fullana) se pidió al portavoz del PP y concejal en Alicante, Carlos Castillo, que explicara los criterios para la distribución de los cargos de confianza en este nuevo mandato. La respuesta, según fuentes conocedoras de la reunión, fue contundente. «Nos sorprendió porque no dio ninguna explicación extensa, sino que fue muy concreto. Castillo no disimuló un ápice y nos confirmó lo que todos sabíamos, que el reparto de asesores responde exclusivamente a una cuestión política», aseguró ayer un diputado de la oposición, quien admitió que la postura del miembro del PP sorprendió también al resto de la oposición. En la tensa reunión, el PSPV estuvo representado por su portavoz, José Chulvi, mientras que por parte de EU y de Ciudadanos acudieron a la Junta de Portavoces sus únicos diputados: Raquel Pérez y Fernando Sepulcre, respectivamente. Este último, en concreto, se convirtió ayer en blanco de las críticas en la Junta. «En Ciudadanos han pasado de pedir el cierre de las diputaciones a aceptar un reparto injusto de asesores y sueldos», añadieron ayer desde la oposición provincial.
Según adelantó este diario, el Partido Popular se queda con 23 de los 29 asesores que tendrá la Diputación en esta legislatura. El recorte en el personal de confianza [en el pasado mandato, con Luisa Pastor como presidenta, el número de asesores ascendían a 46], según subrayan desde la oposición, no es un «gesto» de austeridad del PP y de su socio, Ciudadanos, sino una obligación legislativa. «Que no se pongan medallas que no les corresponden», afirmaban ayer fuentes de la oposición en la Diputación. El resto de asesores se repartirán de forma desigual entre el resto de formaciones con representación en la institución. El PSOE, con 11 diputados, tendrá dos asesores; Compromís, con 3 diputados, contará con un asesor; mismo número que le corresponde a EU, con sólo un diputado. En cambio, Ciudadanos -socio del PP en esta nueva etapa en el Palacio Provincial- dispondrá de dos asesores, pese a que sólo cuenta con un diputado en el pleno. Este reparto y la explicación de Castillo generaron el primer enganchón entre el Gobierno provincial y la oposición, que se prolongó en esa Junta de Portavoces por la distribución, tampoco proporcional, de las dedicaciones exclusivas para los diputados. En este caso, el PP se queda con 15 de los 20 sueldos completos que permite la ley. Los otros cinco se reparten entre el PSOE (dos) y Compromís, Ciudadanos y EU (uno para cada uno). El resto de diputados (hasta 31, la mayoría del PSOE) contarán con dedicaciones parciales, con un sueldo del 75% del total, algo más de 50.000 euros anuales. En este punto, Castillo recordó que las dedicaciones parciales son «a voluntad política» del presidente de la Diputación. Esta afirmación tampoco sentó bien en la oposición, que la recibió como un «evidente chantaje político» y una «vendetta» por el reparto de dedicaciones y también de asesores en el Ayuntamiento de Alicante a manos del tripartito de izquierdas.
Compromís prevé presentar en el pleno de hoy una enmienda, en la que propondrá una rebaja del 15% de los sueldos de los diputados y una distribución «más justa» de los asesores y de las dedicaciones exclusivas. Compromís pondrá hoy sobre la mesa pasar de 29 a 15 asesores, uno por partido y el resto, en proporción lineal.
