¿Cómo está viviendo la resaca de elecciones del 24 de mayo?
En el Ayuntamiento, me está decepcionando el tripartito. Nos estamos encontrando con demasiadas promesas incumplidas.
¿Y a nivel provincial, cómo estás viendo al PP tras el 24-M?
Sobre la batalla por la Diputación, tendríamos que luchar más por defender qué queremos hacer... No estoy escuchando nada de eso. No se habla de gestión.
¿Cómo valora los resultados del PP? Porque existen opiniones encontradas en su partido.
Es cierto que el PP ha tenido un desgaste importante por la gestión en una época complicada de crisis, eso siempre pasa factura, hemos tenido que tomar medidas impopulares, que a la larga han tenido un resultado positivo. También nos hemos visto salpicados por casos de corrupción, y eso también ha influido en nuestros resultados. Pero hay que valorar que hemos tenido una actitud cerrada en el partido, que también nos ha pasado factura. Todo el que quería participado no ha podido hacerlo. Deberíamos cambiarlo para volver a ser la alternativa que necesita la gente .
¿Se esperaba la debacle en Alicante, de 18 a 8 concejales?
No. Sinceramente, no. Pero esa debacle no debe dejarnos sin reflexión, al contrario. Hay que explicar a la gente en qué hemos fallado y en qué vamos a rectificar para que eso no vuelva a ocurrir. Y hay que recuperar la ilusión de los que nos votaron en algún momento y no lo han hecho en esta última ocasión. Hay que acercarse a ellos, volver a escucharles. Hay que recuperar de nuevo la calle. Siempre hemos sabido estar al lado de la gente, y ahora nos toca recuperar esa parcela.
Pero en lugar de explicar qué ha pasado, el PP está centrado en la batalla por la Diputación.
Después de los resultados que hemos tenido, es el momento de que la batalla sea recuperar la calle y no una lucha interna. Nos tenemos que centrar en lo que quiere la gente que ha dejado de confiar en nosotros. Hay que cambiar la dirección de la batalla, de la lucha interna a la lucha en la calle.
¿Las personas que dirigen el partido son las idóneas para dar ese cambio de rumbo en el PP?
Yo no hablo de personas. Tenemos que plantearnos qué política tenemos que hacer en el PP. Los dirigentes se tienen que dar cuenta de que hay que cambiar las políticas para recuperar la ilusión. No se trata de buscar un personalismo, sino de definir una política.
¿A qué candidato avalaría Belén González si pudiera de cara a presidir la Diputación?
Para decidir quién es la persona idónea tendría que saber qué quiere hacer cada uno de ellos. En este sentido, son pocas las propuestas que he oído por parte de los que se posicionan para la Presidencia. Tenemos que hablar menos de los avales para la Diputación y más de nuevos proyectos que ilusionen a la gente.
Pero se habla de avales...
Es un error. No es la política que hay que hacer. No es mala la pluralidad de candidatos, es bueno el debate, pero hay que saber qué se quiere hacer por el bien de nuestros pueblos. Hablar nunca está de más, incluso con nuestros afiliados porque el PP somos todos, no sólo los que somos dirigentes. Tenemos un número importante de afiliados que deben dar su opinión.
¿Hay que abrir el partido como respuesta al mensaje de la ciudadanía y a las críticas internas en algunos militantes?
Sí. Apuesto a que los afiliados opinen siempre que quieran, que tengan canales para hacerlo.
Las bases suelen exigir responsabilidades cuando no se cumple el objetivo. ¿Cree que han faltado dimisiones en el PP tras los resultados del 24-M? ¿O basta con el perdón?
En Madrid ha habido cambios entre los responsables de la campaña, en Valencia ha habido una actitud de apartarse de nuestro presidente, Alberto Fabra, y aquí ha habido varias peticiones de perdón. No hay que restar valor al perdón, pero ha faltado decisión para asumir responsabilidades de quienes han estado al frente.
¿Como quién?
Más que poner nombres, insisto en hacer reflexiones. Tendríamos que asumir que, además de pedir perdón a los ciudadanos y militantes, hay que centrarse en qué se ha hecho mal en este tiempo para no repetir esos errores.
¿Cómo ve la renuncia de Luisa Pastor a seguir presidiendo la Diputación de Alicante?
Es un gesto coherente con las declaraciones previas, en las que dijo que si el resultado electoral en San Vicente no era bueno no optaría a la Diputación. Pero también le hubiera honrado seguir en la lucha por la Diputación. No es malo que haya varias personas que opten, pero que cuenten cómo van a responder a los problemas de los ciudadanos.
¿Cree que es un gesto de honestidad o de que se siente con apoyos insuficientes?
No lo sé. Creo que ha hecho un excelente papel en la Diputación, ha demostrado ser una excepcional gestora. En ese sentido, tiene que estar orgullosa.
José Císcar, Miguel Ortiz, César Sánchez... ¿Qué forma de hacer política te gusta?
Me gusta la política cercana, próxima al a ciudadanía. En los tres, echo en falta conocer el proyecto que tienen para la Diputación de Alicante, que por ahora se desconocen. Hay que potenciar el despegue de la provincia y lo tiene que hacer el PP.
¿Las luchas internas ayudan a que se transmita que la Diputación es sólo un nicho de poder?
El PP debe liderar el impulso de esta provincia. Echo de menos un discurso. Creo que existe, pero que no es transmite.
¿Hay problema de política de comunicación?
Desde luego. En la propia campaña local faltó vender la buena gestión hecha en el Ayuntamiento en los últimos años. En el PP nos falta la habilidad de comunicar. Los ciudadanos tendrían que estar ahora leyendo nuestros proyectos en los periódicos y no la lucha por los avales por presidir la Diputación. La gente tiene que ver que tenemos proyectos, pero para ello tenemos que saber contarlos. Hemos sabido gestionar bien la crisis, pero no contar cómo lo hemos hecho.
Hablando de promesas incumplidas, imagino que se refiere al Ayuntamiento. ¿Cómo está viendo el inicio del tripartito?
Hay que tener la cortesía de los primeros cien días. Algunos que han repetido en el Ayuntamiento han engañado a la población prometiendo cuestiones que eran inviables. Quizá a otros hay que darles un tiempo. Pero algunos llevan muchos años, y desde el Gobierno local les hemos explicado proyectos imposibles de realizar y han hecho oídos sordos solo para ganar unos votos.
¿Cree que Asunción Sánchez Zaplana es capaz de liderar la oposición?
La veo muy capaz. Tiene 15 años de experiencia en el Ayuntamiento. Creo que es la más capacitada para hacer oposición, aunque creo que tiene que salir un poco más del despacho. Tiene mucho que decir y muy bueno, pero echo en falta oírla más. Ella tiene una experiencia que puede ser muy positiva para una oposición constructiva.
Viendo los resultados, ¿se equivocó el partido al elegir a Sánchez Zaplana como alcaldable en Alicante?
No lo sé. Esos supuestos no van a contribuir a nada. Hay que hablar más de futuro que de pasado. Con todo lo que hay trabajar, no sacamos nada con ese debate.
Y sobre la candidatura, tras el 24-M, ¿cree que ahora están arrepentidos de la «limpieza» que hicieron, usted entre las «víctimas»?
Habría que preguntárselo a Sánchez Zaplana. Apostó por un equipo, que ha trabajado en campaña, aunque no se han conseguido los frutos esperados. La campaña tendría que haber sido más abierta y participativa. Le deseo lo mejor a Suni. Creo que tiene mucho que decir, pero quiero escucharla más.
¿Confía en la unión del tripartito hasta final del mandato?
Yo no quiero que le vaya mal a la ciudad, aunque sean otros los que gobiernan. Espero que les vaya lo mejor posible, porque quiero que Alicante salga adelante. ¿Que si pongo en duda que lleguen hasta final de la legislatura? Sí, pero quiero ser cortés estos primeros cien días. Aunque no todos merecen esa cortesía por igual. El PSOE decidió arrasar con todo, aunque nuestro actual alcalde era diputado, así que también debería tener cierto conocimiento de las políticas municipales. Si ha prometido cosas que no sabía que eran irrealizables, me asusta su actitud. Compromís llega de nuevas al Ayuntamiento, hay que ser generosos con ellos. Pero Guanyar, con Miguel Ángel Pavón, tiene el conocimiento suficiente de la política local para no tener ese margen de cien días. Ha prometido cosas que sabía que no podía hacerlas, como rescatar la contrata de limpieza de colegios. No es algo nuevo para él. A los políticos se nos pedía estar a la altura, y algunos, como él, no lo han estado. La gente no nos pone en política para que tengamos esa actitud.
¿Cree que esas promesas incumplidas le supondrá un coste político al tripartito?
Espero que la gente nos encuentre cuando nos busque como alternativa al tripartito. Espero que entonces hayamos cumplido los deberes. Tenemos que volver a ser el referente de la gente.
