Tranquila, con la sensación de haberse dejado la piel por San Vicente y satisfecha del trabajo realizado. Así abandonó ayer Luisa Pastor la Alcaldía. Minutos después de que el pleno proclamara al socialista Jesús Villar como el nuevo primer edil, Pastor realizó un breve balance de sus 14 años al frente del Consistorio. «Se ha terminado una etapa, tal y como ya se hizo visible con el resultado de las elecciones, y empieza otra. Lo que tenemos que procurar todos es que se cumpla ahora el mandato de los ciudadanos, que han dicho no a mayorías absolutas y sí a una mayor participación», zanjó. La todavía presidenta de la Diputación reiteró que deja el cargo «muy tranquila» y desveló que la decisión de dar un paso atrás la adoptó antes de los comicios locales. «No seré la portavoz. Será José Rafael Pascual y le ayudaremos», espetó. Pero, ¿renunciará al acta si no vuelve a presidir la Diputación? «De momento la tengo. Siempre me gusta decir que ya veremos. Voy a seguir trabajando con mi gente y con el grupo haciendo las cosas bien, como siempre lo hemos hecho», concluyó. A. F.