Entre las declaraciones que señalan a Cotino, la Fiscalía cita también al exdirector del Instituto de Finanzas, comisionado de la Fundación V Encuentro Mundial de las Familias y miembro del sector cristiano del PP, Enrique Pérez Boada. «Durante el año 2005 y principios de 2006 -señala el escrito del fiscal remitió al juez Ceres solicitando que se citara como imputado a Cotino «a la mayor brevedad posible»-, según testimonios y correos electrónicos aportados por Juan Carlos Rincón (empleado de Orange Market), declaraciones prestadas por José Selva Guillén, Henar Molinero Sáenz, Enrique Pérez Boada (comisionado de la fundación), así como por el contenido de las actas remitidas por la Fundación, Juan Cotino habría mantenido directa e indirectamente contactos con Álvaro Pérez con la finalidad de que la empresa Orange Market y Trasgos, entre otras, llevaran a cabo esta contratación [la instalación de pantallas de vídeo y megafonía] a través de la creación de una Unión Temporal de Empresas». Un «proyecto que no se llevó a cabo», matiza el fiscal, pero que ilustraría su nivel de implicación y decisión.

Según Anticorrupción, Cotino, conseller entonces de Agricultura y sin cargo en la fundación, participó «activa y regularmente en la organización, responsabilidades y reuniones» de la entidad «y, según testimonio de los interesados, nombrado a sucesivos encargados» del área de infraestructuras (Selva y Pedro Hernández Navarro), «de la que él mismo ha sido señalado como responsable». El fiscal subraya que el expresidente de las Cortes figuraba en 2007 «en el listado de personalidades a las que Orange Market [la firma de «El Bigotes»] realiza regalos de Navidad, donde aparece el coste, en concreto, un chaquetón de Milano por 375 euros». Cotino, quien ha defendido que nunca se ha beneficiado de «ningún dinero público», aseguró en su día que era «falso» que hubiera recibido ese chaquetón.