Es un problema que hay que resolver, pero no es para tanto. Es lo que vino a decir ayer en Valencia el economista Ángel de la Fuente, autor del informe sobre las balanzas fiscales por encargo del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que revela que la Comunidad es la única de las cuatro regiones con saldo fiscal negativo que aporta más de lo que recibe (2.018 millones) pese a tener una renta per cápita inferior a la media, y la peor tratada en el sistema de financiación al perder 1.893 millones por no disponer de los mismos recursos que la media. De la Fuente, quien protagonizó una jornada sobre las «Cuentas Públicas Territorializadas» en el Centro Cultural Bancaja junto con el conseller de Hacienda, Juan Carlos Moragues, le cortó ayer las alas al Ejecutivo de Alberto Fabra. Frente a la posición del Consell, que hace de la infrafinanciación responsable de todos sus males financieros, De la Fuente sentenció: «El problema de la infrafinanciación de Valencia, que existe, no es tan grande». «Estar por debajo de la media es malo, pero no es dramático», aseveró, para añadir que tener un 7 % menos de fondos que la media «es importante, pero no debería condenar a Valencia a un estándar de servicios públicos inferior al resto».

«Es un nivel de financiación bajo -prosiguió- que te obliga a sufrir más, pero no es una diferencia cualitativa respecto al resto; no es una diferencia abismal». Por eso, abogó por «presionar» para «corregir» esa situación y lograr la igualdad pero «sin dramatizar». «No echarnos al monte con el trabuco -bromeó- porque no hablamos de una cosa de este tipo». Y previno frente a las «tentaciones» de entrar en «una espiral victimista y exagerar agravios». De la Fuente avanzó que, según sus cálculos, con la última liquidación y computando las comunidades de régimen común (sin País Vasco y Navarra), la Comunidad está en el 93%, con lo que la infrafinanciación se situaría en mil millones.

La réplica

Moragues, quien intervino a continuación para cerrar el acto -con una nutrida presencia de empresarios y cargos y diputados del PP-, escuchaba con semblante contrariado. Y luego, con diplomacia, le rebatió. El Consell no está por que haya «confrontación entre territorios», por hacer «discursos victimistas» ni «por quitarle a unos para darle a otros», alegó, para agregar: «Comparto con el profesor [De la Fuente], como refleja su informe, que con la financiación no hay igualdad por razón de residencia y se corre peligro en la prestación de los servicios públicos». También le indicó que «siete puntos por debajo de la media de forma continuada e histórica es preocupante». Y propuso que un Comité de Expertos a nivel nacional aborde la reforma del modelo.

Pero no fue la única cuestión en la que el experto de Montoro echó un jarro de agua fría al Consell. En declaraciones a los periodistas, De la Fuente rechazó totalmente que el Gobierno condone parte de la deuda o los intereses derivados del rescate. Es una de las medidas que pide la Generalitat como compensación por el agravio en tanto no se modifica el sistema de financiación. Para el economista, «muy mala idea». «Se han perdonado demasiadas cosas a las comunidades, que siempre quieren que el Gobierno les saque las castañas del fuego; eso generaría muy malos hábitos y supondría más problemas para el futuro», manifestó, para recalcar que no es partidario «en ningún caso de regalar nada». «Otra cosa es buscar formas para reducir los intereses, facilidades de pago y alargar los plazos de la deuda», puntualizó. De la Fuente aceptó, en cambio, que se apruebe «una cierta flexibilidad en los objetivos de déficit para reflejar bien las situaciones desiguales de partida que hay en las distintas comunidades». Esto es, el déficit asimétrico en 2014.