Milagrosa Martínez considera que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad no es competente para juzgarla. Así lo ha hecho saber la exdiputada a la Sala de lo Civil y Penal de este órgano que el martes ya suspendió de modo cautelar el juicio que tenía señalado para el lunes contra ella y contra el resto de lo acusados por las adjudicaciones de la Generalitat a la red de Francisco Correa vinculadas a Fitur. La Sala tiene que decidir ahora, tras la renuncia de la también alcaldesa de Novelda a su escaño en las Cortes y la ausencia de aforados en la causa, qué tribunal es el competente para enjuiciar estos hechos.

En un escrito remitido a la Sala por sus abogados, la política del PP mantiene que se ha producido una falta de competencia sobrevenida (en referencia a su dimisión, que siguió a la marcha de la también ya exdiputada Angélica Such) y que la ley obliga al TSJ a revisar su propia competencia. No considera la exparlamentaria que con la salida del asunto de este tribunal se pudiera producir una pérdida de los hechos objeto del proceso ya que, afirma, estos se encuentran ya «delimitados y determinados».Unos hechos que, precisa, son diferentes a los que se investigan en otras piezas (hay un total de 6) de la denominada rama valenciana del caso Gürtel que se están instruyendo en el TSJ.

Tiene también respuesta Milagrosa Martínez para la Fiscalía Anticorrupción, desde donde se llegó a apuntar que se estaría cometiendo un fraude de ley si el asunto saliera del TSJ. Mantiene la defensa de la regidora que no puede haber fraude de ley porque ninguna norma se pretende evitar. Martínez también pedía, al igual que ya hizo el número dos de la red corrupta, Pablo Crespo, nada más conocer su dimisión, que la vista oral se suspendiera, algo que la Sala ya ha hecho cautelarmente.

Las partes tienen hasta las 15 horas de hoy para pronunciarse acerca de la competencia aunque coinciden las acusaciones (la Fiscalía y la popular, que ejerce el PSPV) en que la causa se juzgue en el TSJ frente a las tesis de los acusados, quienes quieren el asunto fuera del máximo órgano judicial de la Comunidad. Todo apunta a que la causa puede acabar en la Audiencia Nacional, aunque hay también quien apuesta por la de Valencia. En cualquier caso, tome la decisión que tome el TSJ, la presentación de recursos está asegurada, con lo que la discusión sobre la competencia, que podría acabar en el Supremo, puede demorar meses el inicio del juicio.