El Consell se resistió a volver a gravar a las grandes fortunas y ahora es de las pocas buenas noticias para las arcas autonómicas. El impuesto de Patrimonio, recuperado en 2012 y que ha empezado a recaudarse en 2013, es de los escasos capítulos de ingresos que mejoran respecto a las previsiones recogidas en los presupuestos para 2013. Lo desvela el Plan de Ajuste 2013 que presentó la Generalitat para que le flexibilizaran el déficit al 1,60%. El Ejecutivo de Alberto Fabra previó en las cuentas que ingresaría 70,66 millones por este concepto; sin embargo, la marcha del ejercicio le ha hecho modificar el cálculo para estimar una recaudación al finalizar el año de 117 millones.

La cifra representa un 65% más de lo que pensaba ingresar y comporta que el Consell infravaloró el patrimonio de los contribuyentes de la Comunidad sujetos a gravamen, unos 18.500. Y eso que la Generalitat está aplicando los mínimos estatales que dejan exentos la vivienda habitual hasta 300.000 euros y un patrimonio de otros 700.000. El PSPV pide incrementar la tarifa un 20% y reducir el mínimo exento, con lo que el Consell se equipararía a Cataluña, Galicia, Andalucía, Asturias, Murcia, Baleares y Extremadura, que han aplicado subidas.

Críticas del PSPV

El portavoz de Economía del PSPV en las Cortes, Julián López, criticó la gestión económica de la Generalitat y las consecuencias que acarreará para los ciudadanos. «Es decepcionante la pantomima que ha montado Fabra alrededor del déficit asimétrico. Lo único que ha conseguido es un retraso de unos meses para reducir el déficit autonómico en tres décimas del PIB, que tendrá que recortar de todas manera al presentar los presupuestos de 2014», apuntó. López añadió que los ciudadanos de la Comunidad «habremos de hacer el próximo año el mayor esfuerzo que se exige a las autonomías, a pesar de estar entre las peor financiadas». Y concluyó: «Nadie ha reconocido que nuestras dificultades son mayores y, a pesar de ello, el Consell lo ha apoyado. El establecimiento de un déficit igual para todos en 2014 supone más sacrificios para nosotros».