Asunción Sánchez Zaplana, consellera de Bienestar Social, tendrá un papel muy destacado en la convención del PP que arranca hoy en la localidad castellonense de Peñíscola. El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ha elegido a tres de sus consellers para coordinar los trabajos de los documentos estratégicos a debate. Serán el titular de Economía, Máximo Buch; la responsable de Infraestructuras, Isabel Bonig; y la citada Sánchez Zaplana, con lo que la consellera y exconcejal del PP en el Ayuntamiento de Alicante se convierte -junto al alcalde de Santa Pola, Miguel Zaragoza, y la diputada Macarena Montesinos, que han trabajado en los textos de las ponencias- en el principal referente alicantino en la convención -será la que tendrá más presencia- y, de paso, coge puntos dentro de una estructura del Consell que, hasta ahora, tiene al vicepresidente José Císcar y a la consellera María José Catalá como pilares básicos de la gestión.

Fabra intenta así generar nuevos referentes en un Ejecutivo que, hasta ahora, se ha caracterizado por su perfil técnico. La decisión tiene significación, además, en el caso de la ciudad de Alicante. A nadie se le escapa que, en el caso de que el PP tenga que prescindir en 2015 de Sonia Castedo -la alcaldesa de Alicante ha confirmado su asistencia a la convocatoria de hoy- por sus problemas judiciales con el supuesto amaño del PGOU de Alicante, la titular de Bienestar Social es una de las que aparece en todas las "quinielas" para encabezar la lista municipal del PP en los próximos comicios de dentro de dos años.