Este texto que aparenta una oferta de empleo no es más que un reclamo publicitario tras ver los resultados de la preinscripción en las universidades de nuestro entorno, que el pasado sábado publicó el diario INFORMACIÓN. Vemos cómo muchos jóvenes seleccionan titulaciones cuya salida laboral está extremadamente limitada, cuyo futuro profesional será muy incierto y sin embargo tienen notas de corte superiores a 7 (sobre 14). La sociedad y las familias van a realizar un enorme esfuerzo para que estos estudiantes finalicen unos estudios universitarios de, al menos, cuatro años. ¿Por qué seleccionan esas titulaciones? En muchas ocasiones las series de televisión ayudan mucho, un bonito nombre para el grado seleccionado también, así como la orientación familiar y la de los profesores de Secundaria. En algunas ocasiones, muy pocas, la vocación por una profesión suele ser otro condicionante.

Con referencia a Ingeniería Civil/ Obras Públicas recibimos casi semanalmente peticiones de empresas que necesitan técnicos cualificados para la provincia de Alicante o para el resto del mundo. En numerosas ocasiones tenemos que responder que no tenemos a nadie para recomendar porque los que recomendaríamos ya están trabajando, incluso como en los buenos tiempos pre-crisis. Estas peticiones no son solo para estar a pie de obra sino para aspectos que requieren otra cualificación, en el que con proceso de formación del Máster en Ingeniería de Caminos amplían capacidades de trabajo y sobre todo madurez. Estos titulados hacen un papel excelente en temas específicos de innovación y planificación, el mantenimiento de infraestructuras, ingeniería del tráfico, la ingeniería del agua y de las costas, la protección medioambiental o incluso la logística. Sin duda, la modelización matemática de fenómenos reales es otra de las salidas profesionales cuando se trata de ingeniería avanzada, dada la importante transversalidad de su formación.

Una de las titulaciones clásicas de la Universidad de Alicante, Obras Públicas, con unos números estables de más de 1.000 estudiantes matriculados en la titulación durante decenas de años ha pasado una larga temporada de barbecho tras la llegada de la crisis de la construcción, dado que esta se ha focalizado en la tradicional salida profesional de los ingenieros de Obras Públicas como jefes de obra. Tras más de 8 años en el que la Ingeniería Civil/Obras Públicas ha reducido sus egresados en más del 75%, nuestras empresas empiezan a tener serios problemas para encontrar profesionales cualificados en esta ingeniería.

Si no se invierte esta tendencia, con una baja demanda y con una nota de acceso de 5 (sobre 14) será difícil que en un futuro se puedan recomendar a esos profesionales para realizar actividades de alto nivel profesional y quizás en un futuro muy próximo tengamos que importarlos, bien de otras provincias o incluso extranjeros. Esta es, sin duda, una titulación en la que el futuro próximo puede ser alentador para estudiantes con buen expediente, pues menor oferta de egresados, favorece que los mejores puedan tener mejores condiciones económicas que en aquellas titulaciones en las que a pesar de existir mucha oferta de empleo sus salarios mejoran escasamente tras varios años incorporados al mercado laboral. En el caso de los ingenieros Civiles/Obras Públicas claramente sus salarios mejoran tras los primeros años de ejercicio profesional.

Muchas universidades tienen «Titulaciones de sacrificio» para que cualquier joven pueda ser universitario y otras titulaciones más asentadas y con mayor nivel de exigencia para poder ofrecer a la sociedad profesionales de alta cualificación. Lógicamente Ingeniería Civil/Obras Públicas no es ni debe ser una «titulación de sacrificio» puesto que su valor social es todavía muy elevado y su capacidad de inserción en el mercado de titulados es elevada dados sus bajos índices de paro real.