Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La andanada

Con la Feria de Hogueras en los sentidos

Nos metemos de lleno en el mes taurino de nuestra ciudad por excelencia. Con la llegada de junio se nos viene el olor a pólvora a la pituitaria, el azul del sol a la pupila, el «terratrèmol» en los tímpanos y las entrañas. Y a los aficionados al toro ya nos repican los acordes del pasodoble Club Carratalá que volverán a abrir, como es tradición, las tardes de fiesta en nuestra plaza de toros.

Vuelve también el aperitivo, por cierto, del pregón taurino, que llega a su décima edición auspiciado por las asociaciones taurinas Tauro Joven, Puerta Grande, Amigos de Nimes, Pacorro y Club Taurino. Desde las trincheras de la afición militante que pone como armas la música y la cultura. Qué ejemplo de entrega, ninguneado por tanta ceguera política. En esta ocasión pregonará el diestro lorquino Paco Ureña, uno de los triunfadores de San Isidro y anunciado para la tarde del 23 de junio en el ruedo alicantino. Con concierto de pasodobles de la Banda Sinfónica Municipal en la interpretación de un variado repertorio. La cita, el 19 de junio a las 20.00 en la arena del coso de la Plaza de España.

Vivimos estos días, además, la resaca de los comicios municipales. Con la incógnita de cómo se conformará finalmente el gobierno alicantino, a nivel nacional se ha visto lo que parecía evidente: no se puede ir contra la cultura y la tradición del pueblo. La izquierda debe volver a la senda de lo que siempre fue: el sentir del pueblo, del más llano, del de abajo. Del pueblo rural y los toros también. Es curioso que el PSOE haya ganado con holgada diferencia los gobiernos de Castilla-La Mancha y Extremadura, donde defienden sin tapujos la tauromaquia y la caza, por ejemplo. O el caso de Pamplona y Navarra, donde los abertzales han pagado la osadía de proponer unas fiestas de San Fermín sin toros. ¿Casualidad? En Alicante, la izquierda ha saldado igualmente el tripartito bochornoso de la pasada legislatura, con especial significado en la debacle de aquel Guanyar, ahora con las siglas Podem-EUPV, con el que ya no estarán en la sala de plenos ni Daniel Simón ni Marisol Moreno, azote de los aficionados al arte de Cúchares. Pues eso, que reflexionen y se lo hagan mirar. Mientras la izquierda no vuelva a demostrar que defiende a las minorías y que no tratará de prohibir aquello que no le gusta, el panorama no cambiará mucho. La fuerza de la marea les ayudó en 2015, pero la falta de sentido común y el totalitarismo les ha devuelto a la realidad. Y han provocado la entrada de Vox. El error, por tanto, lo acaban pagando todos los alicantinos.

Y entre tanto barullo electoral, en Madrid se está desarrollando quizá el San Isidro más enriquecedor de los últimos tiempos. Y también duro, con tres heridos de consideración: Gonzalo Caballero, Juan Leal y Manuel Escribano, otra vez duramente castigado por un astado de Adolfo Martín, como aquel Madroño en Alicante en 2016. Esta vez fue el de nombre Español, y la herida de 25 centímetros atravesó el muslo izquierdo. Durísimo peaje el de este valiente diestro. En lo más positivo del serial, otra tríada, pero de puertas grandes, con muchos nombres propios más. A hombros salieron Miguel Ángel Perera entre la polémica, Roca Rey entre la admiración y David de Miranda entre la sorpresa. Casi repite el torero peruano el pasado jueves ante los adolfos en el que se conoció como el «Gordo del bombo». Faenón de Roca Rey al excelente Madroñito, que se quedó inexplicablemente sin premio por esas cosas que tiene el público venteño. Era el remate a un irregular miniciclo para conmemorar los cien años del primer «albaserrada» que pisara el ruedo madrileño, del que salió también airoso Emilio de Justo. A esos nombres hay que sumar al ya mencionado Paco Ureña, a Román también con otro buen «adolfo», y aun sin cortar orejas, los apuntes de clase de Juan Ortega y el brillo de la naturalidad de Pablo Aguado.

Con muchos de esos nombres, la apuesta de Simón Casas para Alicante ha subido en interés. Cómo se ha puesto de interesante la feria. Cómo huele a pólvora, a verano, a alegría. Cómo se respira, en fin, a fiesta y a Alicante.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats