Siempre he defendido que a la gente hay que dejarle hablar, por aquello de disipar las dudas entre si calla por voluntad o porque se sabe incapaz. En política ocurre lo mismo. Soy firme participe de que aquellos partidos o políticos que anuncian las mayores aberraciones se expliquen y las defiendan; no soy nada partidario de aislarlos, sino de amplificarlos para que a nadie le quede duda de lo que dicen o de lo que son.

Y creo que a nadie le ha quedado la menor duda, tras leer su entrevista en Información, de lo que representa la candidata de Vox a las Cortes Valencianas por Alicante, la señora Vega. Por economía procesal, me ahorro calificarla.

Para empezar, considero que es importante desmentir la tremenda falacia, repetida no solo por Vox, sino por también por el PP y Ciudadanos, sobre la Ley de Violencia de Género. Al respecto, los que apuestan por derogarla, argumentan sin ningún tipo de rubor que la ley no funciona puesto que siguen asesinando a mujeres. Si aceptáramos como válido este argumento, deberíamos derogar también el Código Penal, dado que cada día hay robos, estafas, homicidios y todo tipo de delitos. En fin, sin más comentarios.

Pero sin duda, la barbaridad que califica a esta formación y en concreto a su candidata por Alicante es la afirmación de que, en caso de violación, hay que proteger al niño y prohibir la interrupción del embarazo. Miren, en política he escuchado de todo, incluso en mi vida he escuchado de todo, pero jamás había escuchado una aberración semejante. No voy a entrar en el recurso fácil del "¿qué harías si fuera tu hija?", sino que voy a intentar seguir el hilo argumental para demostrar la locura de tamaña afirmación.

Dado que la señora Vega entiende que el niño o niña ha de nacer, sí o sí, porque tiene derecho a ser protegido, supongo que, dentro de sus derechos, tendrá el derecho irrenunciable a tener un padre, si el mismo existe. ¿Reconocemos como padre al violador? ¿Y como tal lo inscribimos en el Registro Civil? ¿O creamos una sección nueva en el Registro Civil para "hijos de violadores" y así el nombre del padre permanece oculto? Entonces, ¿ese niño crecería sin padre? ¿Y por qué? Todo niño tiene derecho a conocer a su origen, y si hay padre tiene derecho a conocerlo.

Ya que como todo niño o niña tiene derecho a tener un padre, si existe, debe tener derecho a disfrutar de su compañía. ¿Fijamos custodia compartida? ¿O un régimen de visitas ordinario, fines de semanas alternos y algún día entre semana? ¿lo recoge cada semana el violador en casa de la violada? Y si el violador está en prisión, ¿las vacaciones las pasa en un módulo de convivencia al efecto? ¿O qué hacemos?

Porque supongo que lo que no querrá la señora Vega, una firme defensora de la familia tradicional, es traer un niño o niña al mundo, aunque sea fruto de una violación, como ella defiende y dejarlo sin padre. ¿Verdad? Eso no sería normal dentro del disparate que proponen. Y lo que defienden no es otra cosa que otorgar derechos al violador. Derecho a ser padre, parte inescindible del derecho del menor a tener un padre.

Sé que de nada va a servir esta argumentación para la señora Vega ni sus adláteres, sé que difícilmente va a cambiar el voto de alguien que ya tenga pensado elegir la papeleta de Vox (algo que respeto y ante lo que nada puedo hacer). Pero espero, lo único que espero con esta reflexión es que aquellos que pretenden alcanzar el gobierno con votos como el de la señora Vega sepan que, entre los derechos de un violador y los de una mujer, en VOX eligen al violador.