Solo faltan 24 días para votar en las elecciones generales. Se elegirá a las personas que deberán decidir, entre otras cosas, el futuro del sistema de pensiones de este país. Es un tema que está pendiente desde hace años y que se ha visto agravado por las consecuencias que, sobre el empleo, ha tenido la crisis económica, aún no resuelta y, por otra, por la política que, en materia social, aplicó el PP durante los años de mayoría absoluta de Rajoy.

Una preocupación de los pensionistas actuales y de los que están próximos a serlo es el futuro de sus pensiones. Parece razonable que pidan acabar con la incertidumbre actual. Que se les garantice que suban de acuerdo con el IPC, para evitar debates partidistas con este tema a cada momento. Y que se mejoren progresivamente esas pensiones mínimas que tanta gente aún cobra. Bastantes años hay que cotizar para tener derecho a cobrarlas, no es ningún regalo que se les hace. Y los que salgan elegidos en estas elecciones, aparte de discutir de Cataluña, también deberán buscar soluciones al problema de la Seguridad Social que no sólo es de gastos sino, especialmente, de ingresos.

El deterioro del mercado laboral ha sido evidente. La desregularización ha favorecido la precarización del mismo, así como más facilidad para los despidos. El resultado es que gran parte del trabajo que se crea (cerca del 90% de la contratación) lo es con carácter temporal y mucho a tiempo parcial. Los salarios, y consecuentemente las cotizaciones, han sufrido una importante pérdida. Los pensionistas han sido uno de los sectores más maltratados por el PP en época de Rajoy. Con la excusa de la crisis y amparándose en su mayoría absoluta, sólo subió las pensiones el 0,25% durante 5 años, hasta que tuvo que pactar con el PNV y éste exigió el 1,6% para 2018 y 2019 y retrasar el factor de sostenibilidad.

El problema está en que para 2020 y en lo sucesivo no hay nada acordado en cuanto a subidas de pensiones. Los presupuestos para 2019 no se aprobaron por el voto negativo conjunto de PP, Ciudadanos e independentistas y, ahora, todo está pendiente de lo que salga de las elecciones del próximo 28 de abril. Curiosamente y a pesar de su importancia, parece que no se le presta mucha atención en la campaña al tema de las cuentas de la Seguridad Social.

Por eso ha resultado tan escandalosa la propuesta que Daniel Lacalle, candidato y gurú económico de referencia del PP ha dicho en «El Economista» del día 31-3-19: «España es el único país que, con respecto a otros que han estado en una situación similar, han crecido las pensiones. Los demás las han rebajado hasta el 40%. Por tanto, el debate no es cuánto se revalorizan, sino cuánto se recortan. Un 20, un 30 o un 40%...». Más claro, agua. Una confesión demoledora. Para justificarse ha tenido que salir a decir que le han manipulado sus declaraciones, que no se le ha entendido, etc. Es muy grave. Insinuar que a los pensionistas se les ha subido demasiado y que deberían haberse planteado recortes como han hecho otros países es intolerable.

En Elx, el propio Ayuntamiento declaró, a finales de 2017, que había 38.900 personas mayores de 65 años y que, entre 60 y 65 años, había otras 15.300. Deben superar ahora las 55.000 personas, casi un 25% de la población ilicitana. Un porcentaje muy importante. Y una gran parte de ellas estará jubilada, aunque la Seguridad Social no facilita datos locales. De lo que pase con ellos dependen muchas cosas en este municipio

En España hay 9.705.436 pensiones al mes de marzo. Su cuantía media es de 986,71 euros al mes. En la provincia de Alicante existen 317.589 pensiones, con una media de 854,66 euros/mes. La inmensa mayoría de las pensiones, en la provincia de Alicante, es de auténtica miseria. Incluso las de jubilación, las más altas del sistema: la media de las 201.869 existentes es de 966,82 e/mes y si nos vamos a las de Viudedad, hay 79.416 en la provincia y suponen 646,81 e/mes de media. Y si limitamos el análisis al régimen de autónomos, apaga y vámonos. Existen 40.277 pensiones de jubilación en autónomos en la provincia y su media actual está en 738,34 euros mensuales.

¿Cree alguien que, con estas cantidades, la solución al problema puede pasar por insinuar posibles recortes en las prestaciones? Busquen recursos donde sí los hay, atajen el fraude fiscal y la economía sumergida y aparecerán fondos para pagar la Seguridad Social y hacer una España más justa. De las pensiones hay que hablar y mucho en esta campaña. Pero en serio.

Los políticos que se presentan deben aportar soluciones y no agudizar los problemas.