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Momentos de Alicante

Primeras elecciones municipales democráticas tras la dictadura

Hace 40 años, el martes 3 de abril de 1979, se celebraron en la ciudad de Alicante las primeras elecciones municipales democráticas tras la Guerra Civil y la dictadura del general Franco.

Las anteriores elecciones municipales democráticas se habían celebrado en Alicante 48 años atrás, el 12 de abril de 1931.

Candidaturas

La candidatura de Unión de Centro Democrático (UCD) estaba encabezada, como aspirante a la alcaldía, por Luis Berenguer Sos. Veterano abogado de 66 años, había sido decano del Colegio de Abogados de Alicante y durante la dictadura había intervenido en el Tribunal de Orden Público (TOP) defendiendo a alicantinos procesados por su ideología. Le seguían en la lista otros nueve hombres, cuatro de ellos abogados jóvenes (uno era hijo del primer alcalde franquista), además de un profesor mercantil, un empleado de banca, un médico, un contratista de obras y el vicepresidente de la Asociación de Asalariados Trabajadores del Taxi.

El cabeza de lista del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) era José Luis Lassaletta. Nacido en 1933 y licenciado en Filosofía y Letras, a finales de 1978 había fundado la sección sindical de UGT de la Caja de Ahorros de Alicante y Murcia, de la que era empleado desde 1958. Le seguían un mecánico de automóviles y presidente de la asociación de vecinos «La Voz» del barrio de La Florida, una licenciada en Filosofía y Letras y profesora en el instituto Miguel Hernández, un estudiante de 22 años y miembro de las Juventudes Socialistas, un empleado de Renfe y sindicalista, una funcionaria del PSOE, un chapista, un encuadernador, un abogado laboralista y la presidenta de la Asociación de Padres de Alumnos del colegio José Antonio.

El candidato a la alcaldía por el Partido Comunista de España (PCE) era Salvador Forner, de 31 años. Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada y profesor en el CEU de Alicante desde 1973. En 1975 también obtuvo el título de periodista en Madrid. Le seguían en la lista hombres y mujeres vinculados mayoritariamente con el sindicato Comisiones Obreras (CCOO).

La candidatura de Coalición Democrática (CD) estaba encabezada por el ejecutivo de banca Carlos de la Torre Sánchez. Esta coalición se había fundado cuatro meses antes y agrupaba, entre otros, a los partidos Alianza Popular (presidido por Manuel Fraga), Acción Ciudadana Liberal ( José María de Areilza) y Partido Demócrata Progresista ( Alfonso Osorio). Debido a los malos resultados obtenidos en las elecciones generales del 1 de marzo de 1979, CD no presentó candidaturas municipales en algunas capitales de provincia, como Madrid, Bilbao o Córdoba, pero sí lo hizo en Alicante.

El partido Acción Republicana Democrática Española (ARDE) se había creado en julio de 1960 en el exilio, con la fusión el año anterior de los dos partidos republicanos más importantes en España durante la Segunda República: Izquierda Republicana y Unión Republicana. Su candidato a alcalde en Alicante era Emilio Berenguer Requena, presidente provincial de la Agrupación de Militares del Ejército de la República. Fue herido defendiendo Madrid en febrero de 1937 y, tras finalizar la guerra civil, estuvo deportado en varios campos de concentración de Francia y Marruecos, y pasó dos consejos de guerra durante el Gobierno de Pétain. Se incorporó al ejército estadounidense durante la Segunda Guerra Mundial, tras la liberación de Argelia, sirviendo en las Fuerzas Aéreas «Strategic Air Forces».

El partido trotskista Liga Comunista Revolucionaria (LCR) había sido fundado en 1971. Encabezaba la candidatura municipal Justo Sansano. Peón albañil de 23 años, era militante de la Comisiones Obreras de la Construcción y miembro del comité de empresa de Cubiertas y Tejados. Había sido detenido y encarcelado varias veces por razones ideológicas y estuvo tres años exiliado en Francia. En la lista le seguían otros sindicalistas de CCOO y una estudiante de 19 años.

El partido Moviment Comunista del País Valenciá (MCPV) estaba federado con el Movimiento Comunista de España (MCE), fundado en 1971, que se definió primero como marxista-leninista y luego como maoísta. Su cabeza de lista en Alicante era Marillum Quiñonero, quien pese a su juventud (24 años), ya llevaba varios años militando en los movimientos estudiantil y feminista. En 1973 había sido detenida y procesada por el TOP por asociación ilícita.

El candidato a alcalde por Alicante Independiente, un partido local de derechas, era el exjugador del Alicante CF y empresario de transporte Antonio Martínez Serrano.

Durante la campaña electoral, que finalizó el 1 de abril, se organizaron numerosos actos por los diferentes partidos, así como mesas redondas en las que se confrontaron programas y se intercambiaron críticas. Al no contar entre sus diez primeros candidatos con ninguna mujer, UCD recibió muchas críticas por parte de los partidos de izquierda. El futuro de la Diputación Provincial fue uno de los temas estrella en aquella campaña, ya que tanto el Estatuto de Autonomía como la nueva Ley de Régimen Local podían favorecer presumiblemente su desaparición. Los partidos de derecha se oponían a ello y el socialista Vicente Soler Marco, representante del Consell preautonómico (era director general del Consejo del País Valenciano), desviaba la responsabilidad de tal decisión al futuro parlamento valenciano.

Resultado

Con un censo electoral de 158.933 alicantinos, los 91.126 votantes (57,3%) eligieron a los 27 concejales (23 hombres y 4 mujeres), que se repartieron PSOE (13), UCD (10) y PCE (4). Sorprendentemente, Alicante Independiente quedó en cuarto lugar, con 4.300 votos (4,72%), por delante de Coalición Democrática, que solo consiguió 2.691 votos (2,96%).

El 19 de abril se celebró el pleno en el que fue nombrado el nuevo alcalde de Alicante (el primero democrático en 48 años). Por 17 votos a favor y 10 en contra fue elegido el socialista José Luis Lassaletta. En su discurso dijo que, en cierto sentido, el nuevo Ayuntamiento era heredero de aquel que fuera elegido el 12 de abril de 1931, con Lorenzo Carbonell como alcalde.

La plaza del Ayuntamiento estaba repleta de alicantinos, que aclamaron a los concejales a su salida. El alcalde Lassaletta fue paseado a hombros.

El triunfo de UCD en los pequeños municipios hizo que consiguiera la presidencia de la Diputación Provincial ( Luis Díaz Alperi).

Programas

La nueva corporación alicantina comenzaba su andadura dentro de un marco legal que urgía reformar, con la misma Ley de Régimen Local que había regido durante el franquismo, y con las arcas exiguas.

Aunque en los programas de los tres partidos representados en el Ayuntamiento predominaban las coincidencias, había algunas diferencias de fondo.

Los tres partidos coincidían en la necesidad de reformar la Ley de Régimen Local, en la revisión del PGOU, en la lucha contra la especulación del suelo y las infracciones urbanísticas, en la conservación del Casco Antiguo (con ampliación hasta Alfonso X el Sabio y Doctor Gadea, según el PCE), en la construcción de la Vía Parque y la Gran Vía, en la creación de grandes parques (Lo Morant, El Palmeral y en los dos castillos) y zonas verdes en los barrios, en un plan de control del medioambiente y en la creación de ambulatorios en los barrios.

Socialistas y comunistas coincidían en cuanto a la construcción de viviendas sociales, haciendo hincapié los primeros en las de alquiler. Centristas y comunistas coincidían en la conveniencia de suprimir el tráfico privado por el centro, si bien los segundos proponían su total peatonalización.

Solo el PCE proponía la creación de un área metropolitana con municipios vecinos.

Las mayores desavenencias se concentraban en dos cuestiones: la municipalización de los servicios públicos y el movimiento ciudadano. Mientras PSOE y PCE estaban a favor de la municipalización a corto y largo plazo, UCD se oponía y propugnaba la creación de empresas mixtas. En cuanto al movimiento ciudadano, los comunistas querían su institucionalización en el seno del ayuntamiento, los centristas estaban conformes con que tuviera voz en el consistorio pero sin poder de decisión, en tanto que los socialistas proponían una posición intermedia y más ambigua.

www.gerardomunoz.com

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