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Por sus propuestas los conoceréis

Me refiero por ejemplo a Ciudadanos, el partido que ha hecho bandera de la unidad eterna de España, con la que golpea machaconamente a esa izquierda empeñada en romperla.

El partido de Albert Rivera e Inés Arrimadas tiene una idea un tanto sui generis del feminismo: para Ciudadanos, la libertad de la mujer consiste entre otras cosas en poder ejercer la prostitución o alquilar por unos meses su vientre para dar a luz a la criatura que otros desean y no pueden tener.

Pero ¿no es esta última práctica, que ese partido califica de "altruista", más que la mercantilización del proceso reproductivo? Para los partidos liberales como es Ciudadanos, todo en la naturaleza es comercializable, ¿también el cuerpo de la mujer?

Basta con leer lo que sucede por ejemplo en Estados Unidos, donde la que llamamos gestación subrogada se ha convertido en una industria, en un suculento negocio que, aprovechando la frustración de unas y la necesidad económica de otras, mueve millones de dólares.

¿Puede hablarse de libertad en una relación tan desigual entre las partes que firman el contrato de alquiler de un vientre para la concepción por encargo de una criatura?

Porque conviene no engañarse: salvo situaciones realmente altruistas, que serán siempre la excepción, las mujeres que se prestan a alquilar su vientre para tal fin lo hacen sobre todo acuciadas por la necesidad económica.

Ocurre también con la prostitución: por supuesto que hay esas finamente llamadas "call girls" que acuden a los hoteles de lujo o a los domicilios privados para alquilar su cuerpo por unas horas o una noche, pero la mayor parte de quienes se dedican a ese oficio lo hacen impelidas por la necesidad económica.

Pasa con el turismo sexual, por ejemplo, ese del que escribe en sus novelas el francés Michel Houellebecq. ¿No se trata de una miserable explotación por individuos -, mujeres, pero también homosexuales del mundo rico- de la miseria de lo que antes llamábamos Tercer Mundo.

Basta con ver lo que sucede también en nuestras ciudades ¿No son la mayoría de las prostitutas mujeres africanas, latinoamericanas, de Asia o de la Europa más pobre, las que se dedican, muchas veces obligadas o simplemente engañadas, a ese oficio? ¿No es una nueva forma de colonización?

Hablar de libertad de la mujer cuando la necesidad obliga tanto en lo que se refiere a la gestación subrogada como a la prostitución- es puro escarnio. Efectivamente, ¡por sus propuestas los conoceréis!.

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