La traca final del mercado invernal de fichajes prendió en Elche y estalla en Alicante con el delantero Benja Martínez como detonante. Un problema en el Martínez Valero y una solución en el Rico Pérez; un enigma en el club franjiverde y un notable salto de calidad y exigencia para el Hércules. Sólo los caprichos y arcanos del fútbol pueden explicar que un jugador defendido «a capa y espada» por el entrenador y el director deportivo de un club salga por la puerta de atrás para reforzar al eterno rival, aunque esté en una categoría inferior. Futbolista muy querido en el vestuario franjiverde, Benja ha recibido el respaldo constante de su preparador Pacheta y de Jorge Cordero, responsable técnico de la entidad, que eran contrarios a su salida, máxime tras la marcha de Sory Kaba. Titular en el último partido ante el Oviedo, Benja ha jugado con regularidad esta temporada, aunque es cierto que no ha marcado de franjiverde en Segunda A. Todo apunta a que el muñidor de su salida es el accionista mayoritario José Sepulcre, nada partidario del ariete catalán, que el curso pasado anotó 14 goles para el Elche -varios de ellos decisivos en el ascenso- y el anterior 26 en la Cultural Leonesa. Justo en el momento clave de la temporada, el Elche decide que tiene bastante en ataque con el veterano Nino y los recién llegados Yacine y Carlos Castro, pero resulta obvio que el adiós sin recambio de Benja le debilita.
Todo lo contrario que al Hércules, cuyo director deportivo Javier Portillo suspira por el catalán desde noviembre. Es cierto lo que dijo el técnico Planagumà de que los inversores Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramírez, por este orden, han puesto toda la carne en el asador para intentar salir este año del pozo de la Segunda B más devaluada del último lustro. Las urgencias se han disparado en el Rico Pérez con la grave lesión de Emaná y con la baja forma que ha mostrado Jona hasta el momento. Y es conocida la buena relación entre Ramírez y Sepulcre, que ha allanado el camino a esta sorprendente operación que le quita pólvora al Elche para inyectársela al eterno rival.
