Tiene difícil el equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Alicante explicar el atasco de licencias para la apertura de negocios que hay en Urbanismo. No han facilitado los números absolutos, pero teniendo en cuenta que hay un establecimiento cuyos responsables están esperando dos años a que el técnico municipal pase por el local para realizar la inspección previa a la licencia definitiva, nos podemos hacer una idea de la magnitud del desastre. El silencio de la edil de Urbanismo, María Carmen de España, ante la situación no puede ser más elocuente. Cuando el PP estaba en la oposición le replicaba al entonces edil de Urbanismo Miguel Ángel Pavón (Guanyar), que no sabía gestionar cuando se quejaba de falta de personal en el área. Tanto antes como ahora, tener un solo técnico para estos menesteres, quien además realiza las visitas a pie, no hay ayuntamiento serio que lo resista. Las declaraciones de ayer vuelven al PP hoy como un bumerán.
