La idea original de hacer de Santa Pola del Este un vergel junto al mar fue realidad durante algunos años, y fue durante esa época y por esa razón que mi marido y yo decidimos comprar un apartamento en dicha zona. De eso hace más de treinta años. Desgraciadamente yo, y mucha gente más, venimos apreciando que desde hace varios años, y particularmente los últimos tres años, Santa Pola del Este es un modelo de abandono y desidia muy lejos de lo que fue el proyecto original.

Para dar fe de lo que digo voy a enumerar algunos de los temas que se trataron en la reunión de vecinos que tuvo lugar el día 30 de julio del 2018 a las 20 horas en el aparcamiento de Santa Pola del Este, donde el año pasado estaba un chiringuito.

1. Jardinería. Los vecinos de la urbanización opinamos que las zonas verdes están hechas un desastre. Las plantas no se limpian, no se cuidan ni se abonan, los árboles tampoco se podan ni se recortan y, sobre todo, no se riega nada dejando morir la vegetación que existía, por lo que los espacios que deberían estar verdes se han convertido en secos eriales llenos de hojas y matas muertas, amén de la basura que se va acumulando, y donde anidan habitantes insanos y peligrosos. Incluso una persona se ha instalado a vivir junto a la caseta de los jardineros y ha convertido ese espacio en un muladar.

2. Talud entre el paseo marítimo y las rocas. Zona prevista para ser ajardinada y ser una zona verde entre el pavimento y el mar, hoy es un despropósito. Poco sé de jardinería, pero observo que en las autopistas crecen lujuriosamente las adelfas llenas de flores, el secreto es una conducción a goteo que funciona automáticamente. Sencillo y poco costoso sistema para tener verde el borde del paseo que le daría un toque de buen gusto urbanístico al paseo y a la ciudad.

3. Limpieza. Brilla por su ausencia en las calles, escaleras, jardines y espacios comunes urbanos donde se prodigan, entre otras basuras, las cacas de perro. Sin olvidar que los contenedores de reciclaje son escasos y frecuentemente están llenos, acumulándose las bolsas en el suelo provocando los consabidos malos olores.

4. Mantenimiento. Las cosas se deterioran y necesitan reparación. En Santa Pola del Este no se repara nada. No se reparan las aceras, las escaleras, los muretes que se rompen, etc. Es el tercer verano que veo en mi calle, avenida Oscar Esplá, bajo la piscina de la urbanización Arcos del Sol, un murete que se reventó y nunca se reparó. Esto es sólo un ejemplo de dejación.

5. Ordenamiento urbano del paseo. Pasear por este espacio es peligrosísimo. No existe ni una sola señal de tráfico. Los ciclistas circulan a su antojo con el peligro que supone para los viandantes y en particular para los niños.

En el año 2018 se ha batido el record en no sé si llamarlo desidia, abandono o falta de respeto al contribuyente de Santa Pola del Este que paga sus impuestos religiosamente mientras que sus gobernantes no corresponden debidamente.

Tres puntos como ejemplo.

1. La infracción urbanística que a todo el mundo llama la atención y que se ha producido en la avenida de La Armada Invencible rompiendo la armonía de la zona.

2. La orden de prohibición de aparcamiento el día de la Cena de la Luna LLena, dando preferencia a un acto deportivo frente a una noche lúdica y popular que celebraba el 13º aniversario. Aunque posteriormente se subsanó el error gracias a la diligencia del grupo organizador, pero aún vino la Policía esa misma noche amenazando con traer la grúa y llevarse los coches.

3. Reserva de mesa. Aunque se había reservado una mesa para autoridades el Ayuntamiento no se dignó hacer acto de presencia mostrando así su displicencia hacia la actividad organizada altruistamente por un grupo de vecinos que trabajan por los demás y por la ciudad sin recibir nada a cabio.

4. Desaparición de chiringuitos. Por último pero no lo menos importante como dicen los ingleses, la desaparición de los chiringuitos. Las instalaciones playeras más populares y típicamente españolas han desaparecido del paseo dejando a Santa Pola del Este sin un lugar de ocio donde tomarse un refresco o un helado al lado del mar. ¿por qué esa abulia o dejación con esta zona de la ciudad?

Esta queja la hago en mi nombre y, creo que, en nombre de los asistentes a la reunión de vecinos de S. Pola del Este. El problema del abandono de Santa Pola del Este, ya dije en la reunión, se debe a que una gran mayoría somos ilicitanos, que pagamos religiosamente nuestros impuestos pero que no damos votos a los políticos.