Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Joaquín Rábago

360 grados

Joaquín Rábago

Un historiador francés critica a Merkel y a Macron

El conocido historiador y sociólogo francés Emmanuel Todd no ha ocultado nunca su anglofilia, que tal vez tenga algo que ver con sus orígenes protestantes en un país mayoritariamente católico.

En cualquier caso, Todd vuelve a dar fe de esa inclinación en una entrevista con el semanario alemán Der Spiegel en la que denuncia tanto a la Alemania de Angela Merkel como a la Francia de Emmanuel Macron.

Todd critica la pretensión germana de que los otros países europeos adoptasen frente a la crisis financiera las mismas recetas económicas que aplicó en casa y que combinan «un orden social autoritario y desigual» con una «fuerte integración» de cada uno.

Para el ensayista francés, es absurdo la aplicación «dogmática» de esas recetas: «en Italia o Grecia no tiene ningún sentido la economía social de mercado», mientras que en Francia el «ordoliberalismo (alemán) se asocia a una política económica represiva».

El intento de «imponer a países con bases antropológicas distintas» el exitoso modelo económico germano no puede sino acrecentar las diferencias entre los países y acabar convirtiéndose en «una pesadilla para todos», advierte. El economicismo, tal y como pretende aplicarlo Berlín, exige «una visión uniforme de las sociedades. Pero cuando éstas han de competir entre sí, cuando se las obliga a adaptarse» a una norma impuesta y se sienten amenazadas de «disolución», tienden «a replegarse sobre sí mismas».

El estrés económico europeo «hace que los italianos se vuelvan cada vez más italianos; los ingleses, cada vez más ingleses, los franceses, cada vez más franceses, y lo mismo pasa con los alemanes». Sometidos a presión, los pueblos retornan a sus «valores y propiedades de origen». «La cultura autoritaria y colectiva alemana posibilitó la congelación salarial y una política de desinflación competitiva destinada a garantizar la competitividad de las empresas, que tiene una orientación nacionalista», critica Todd.

Pero tampoco escatima ese críticas al presidente francés Macron, a quien califica de «engendro de una elite pequeñoburguesa», que actúa «irresponsablemente» pues «no tiene ya posibilidades de influir en los asuntos económicos ni en los geopolíticos y trata de compensar su impotencia práctica con una inflexibilidad teórica». Según el anglófilo Todd, la «rígida postura» de París en el tema del Brexit podría dar lugar a un conflicto con Londres, y la canciller Angela Merkel haría bien por el contrario en facilitarles a los británicos una «salida» de la UE sin excesivos traumas. «El racionalismo francés, la obsesión francesa con la uniformidad administrativa, que también domina a la Comisión Europea, impide llegar a soluciones pragmáticas para la crisis europea», critica Todd.

Para ese historiador, haría falta cuanto antes en Europa un liderazgo mucho más flexible y capaz de adaptarse mejor a la «múltiple realidad de nuestras sociedades». En cualquier caso, agrega, se equivocan quienes creen que Francia «representa la democracia liberal». Ocurre lo contrario, dice. «En Francia han implosionado los partidos políticos sin los cuales no hay posibilidad de elegir entre alternativas». «La burocracia y el servicio público se han independizado, y Macron se rige por ese espíritu. Lleva a Francia a una nueva fase autoritaria y sigue el estilo realista de Luis XIV y el bonapartista de los dos Napoleones».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats