Hablar del Lucentum es siempre recordar unos de los mejores años de mi trayectoria deportiva. Me enamoré de esa ciudad y de ese club. No dejo de acordarme de lo que bien que me trató Paco Pastor. Merece que un torneo importante lleve su nombre por todo lo que hizo por el baloncesto en Alicante. Espero que la ciudad vuelva a vivir días de fiesta como los que vivimos nosotros en aquella inolvidable eliminatoria ante el Lleida. Recuerdo que el Centro de Tecnificación nunca había estado como en ese definitivo partido. Hubo polémica en Lleida y la gente se calentó mucho para ese partido en Alicante. Fue un día de felicidad absoluta haber llevado al Lucentum por primera vez en su historia a la ACB. Tocamos el cielo e hicimos realidad el sueño de tener un equipo en la máxima categoría. Me alegra mucho que en el club de hoy esté Guillermo Rejón. Está haciéndolo muy bien como director deportivo, va a multitud de partidos y para él sería muy importante conseguir el ascenso a la LEB Oro. Es una persona que se está implicando mucho en el proyecto y al que le deseo que le vaya muy bien. Para el Lucentum es una gran oportunidad conseguir el ascenso. La LEB Oro se está revalorizando mucho después de pasar una importante crisis. Es una liga que está ganando en competividad con muchos jugadores provenientes de la ACB.

Seguro que la afición responde porque ya tendrá ganas de vivir una final de estas características. El Centro de Tecnificación vestirá sus mejores galas pero nadia debe fiarse del Canoe. El Lucentum le ganó sus dos partidos de la fase regular pero ahora no tiene nada que ver. Viene sin presión y seguro que será peligroso. Alicante siempre me ha tratado muy bien y nunca se sabe qué deparará el futuro, pero ahora estoy muy a gusto como director de la cantera del Valencia Basket. Roig está haciendo mucho por el baloncesto y le estamos todos muy agradecidos. Tomé la decisión de dejar los banquillos pero sigo siendo entrenador de baloncesto. Le deseo mucha suerte al Lucentum en esta final por el ascenso.