Esperamos esa respuesta del señor Montoro tras conocer su negativa a que nuestra ciudad se acoja a la misma fórmula que en el año 2014 sí autorizó para el Ayuntamiento de Madrid ?gobernado entonces por el PP de la señora Botella?, una medida que permitiría liberar a nuestro Ayuntamiento del Plan de Ajuste que en su día el propio Ministerio de Hacienda impuso ante la desastrosa gestión económica del PP de las alcaldías del señor Alperi y la señora Castedo.

¿Por qué exactamente el mismo mecanismo al que se permitió que se acogieran sus compañeros del PP en Madrid se niega ahora de forma rotunda a un Ayuntamiento como el de Alicante, que desde 2015 ha rebajado de forma muy notoria su deuda municipal heredada del desgobierno y la incompetencia de los mandatos del PP?

¿Será que Montoro, al ritmo que marcan Mariano Rajoy y Albert Rivera, no tiene bastante con la nueva bofetada de los Presupuestos Generales de este año para las inversiones alicantinas? No contento con el maltrato inversor a nuestra tierra, se pretende hacer caso omiso a la propuesta de Compromís para rescatar la ciudad del Plan de Ajuste que ha sido aprobada en el pleno del Ayuntamiento de Alacant y en el Congreso a través de una PNL.

¿Por qué ahora que se están relajando los severos e irracionales criterios para que las corporaciones locales puedan ejecutar inversiones sostenibles, no se facilitan salidas razonables a los ayuntamientos con planes de ajuste que sí hemos hecho los deberes y tenemos nuestros parámetros controlados en cuestiones como el volumen de la deuda municipal o el plazo de pago a proveedores? ¿Por qué insiste el gobierno del PP, apuntalado por Ciudadanos, en mantener el castigo que supone la intervención ministerial del Plan de Ajuste a la capacidad inversora de la Administración local, la autonomía municipal o la contratación de personal?

¿Por qué quieren mantener el castigo a nuestra ciudad, mientras se lo levantaron a ayuntamientos del PP como el de Madrid en el año 2014? En aquel caso permitieron transferir los créditos asociados al Plan de Ajuste a otros préstamos libres de las terribles condiciones que suponían y suponen acogerse a estos planes. En el caso de Alicante, este plan de ajuste permitió atender las facturas impagadas a los proveedores, y ajenas al presupuesto municipal, por más de 70 millones de euros que se desbordaban en los cajones. Eran los tiempos de la señora Castedo? y también de los señores Barcala, Castillo, etcétera.

Desde Compromís, y creemos que también desde el conjunto de la sociedad alicantina, no podemos encontrar una respuesta coherente ni razonable a estas preguntas, y solo acertamos a colegir que la fórmula del año 2014 fue un traje a medida para la señora Botella, para el PP madrileño, y que ahora, sin ningún argumento técnico solvente, no se quiere generalizar por cuestiones estrictamente partidistas del Gobierno de Rajoy y Montoro. Es una penalización más, absolutamente indecente y vergonzosa, hacia nuestra ciudad, hacia las alicantinas y alicantinos.

Pero desde Compromís no nos vamos a quedar callados ante su no. De la misma forma que no callamos ante el maltrato de la financiación autonómica o al maltrato inversor. Vamos a seguir presionando en esta dirección en Madrid, a través de nuestro grupo en el Congreso, y vamos a reclamar al gobierno municipal a obligar al Ministerio a sentarse con el Ayuntamiento de Alicante para hablar de esta cuestión. Hay que seguir reivindicando que se libere a la ciudad del Plan de Ajuste, y nos encantaría hacerlo acompañados del resto de grupos municipales y del conjunto de la sociedad civil alicantina.

#RescatemAlacant no es solo un hashtag, es un signo de identidad de Compromís que vamos a hacer valer para liberar nuestra ciudad de la herencia envenenada del PP del Plan de Ajuste. Si Madrid pudo hacerlo y Montoro se lo permitió, ¿por qué no Alicante? No queremos ser más que nadie, pero estamos más que hartos de ser menos que cualquiera. Más que hartas.