El refranero dice que «cuando las barbas de tu vecino veas quemar, pon las tuyas a remojar». El personal, por si acaso, debería aplicarse el cuento, mientras que yo, por si acaso, «me hago el pavo» -¡menos mal que no estamos en Navidad!-, me encomiendo a toda la corte celestial, hago rogativas y pido a las Santas Justa y Rufina, a los patrones de la villa -la Virgen de Monserrate y Nuestro Padre Jesús-, a don Antonio Roda, al prócer don José María Muñoz y a La Armengola - Gloria, por supuesto- que intercedan ante los Ángeles de la Guarda para que sean condescendientes con quienes no han hecho los deberes, pese a que saben a lo que se exponen y el peligro que se corre (del verbo andar rápido). Ya se sabe que «quien avisa no es traidor, es avisador»; así es que, «atarse» los machos y que el Señor nos pille confesaos, porque, a poco que se den las condiciones mínimas, se puede liar la mundial -en forma de «tormenta perfecta»- y cargarse lo poco que queda. ¡Ya habéis visto lo del huracán Irma!. Últimamente se ha acuñado -sobre todo en los medios- el término «tormenta seca» y ya se sabe que cuando a los plumillas nos da por algo o se nos hace caso o se corre el peligro de quedarse apagado o fuera de cobertura, por lo que empezad a tener en cuenta ciertas cosas, ¡por si acaso!

Muchos os preguntaréis ¿qué es una tormenta seca?. ¿Es un invento de los «juntaletras/meteorólogos»?. En una tormenta seca no cae ni una gotica de agua; o sea, los agricultores se comen un mojón, además del de la sequía. ¡Vaya por Dios; mi «goso» en un «poso»!. Lo que sí hay en una «tormenta seca» es mucho viento y abundantes descargas eléctricas; es decir, mogollón de polvo en suspensión -a saber, mierda en el ambiente, no tengáis la mente sucia-, además de truenos, rayos y centellas, que diría Don Quijote. Por este motivo, a la «tormenta seca» también se la conoce como «tormenta eléctrica»; es decir, que da unos «chispasos» de cojones y que asustan bastante, ¡por lo menos a mis perricos!

Y ahí es donde quiero ir a parar, porque no hace mucho leí en el periódico que -creo recordar que fue en la Sierra de Redován- se había producido un episodio de estas características -no sé si iguales a las de una «tormenta seca», porque, aunque me apellido Medina, no tengo nada que ver con los ex «hombres del tiempo» de TVE, Mariano y Fernando- lo que originó un incendio que, ¡menos mal!, fue sofocado enseguida. ¡La que se podía haber «liao», ya que en una zona de esa sierra, siempre que fuese en la ladera donde está el cementerio, hay una empresa pirotécnica en la que se almacena pólvora!. En ese caso -¡permítaseme una licencia inocente y respetuosa, sin ánimo de nada!- no se habría cumplido lo que canta Mecano en su copla «No es serio este cementerio», porque se habría montado una juerga con fuegos artificiales a cargo de una reputada empresa ganadora de muchos premios.

Retomando el hilo, ¿alguien se ha parado a pensar en la que se podría liar en la sierra de la Muela?. ¡Siii, ya lo sééé!. Me diréis que han «talao» los pinos que estaban secos en la zona de entrada al túnel, según se viene del polígono industrial Puente Alto, junto a la rotonda donde están la sede central del Grupo Marcos y un par de concesionarios de coches. Es cierto que no hay pinos en esa parte de la sierra, pero sí mucho matorral -más seco que la mojama- y con todas las condiciones para arder como una tea. Por allí pasa un tendido eléctrico, que, a poco que suelte dos «chispasos», sople un poco de viento -aunque sea una ligera brisa- y se empareje la cosa, se lía la mundial, como sucedió hace un par de veranos en la ladera de la sierra en la pedanía del Raiguero de Bonanza.

Por si acaso, el personal debería dejar de mirarse el ombligo, olvidar las peleas internas, aparcar las rencillas personales, hacer todo lo posible para que las aguas vuelvan a su cauce y ponerse manos a la obra para evitar que, en una zona tan seca como la que nos ocupa, se pueda producir un «desaguisado». ¡El pueblo lo agradecerá, porque demostrarían que, aunque sea mentira, se le tiene presente!. Pero si no se lo agradece, deberán pensar que es porque se han pasado por la entrepierna a los ciudadanos y han mirado más por sus intereses personales que por los colectivos. ¡Que piensen que saldrían en los papeles y en la foto, aunque sea «pay per view» (pagando), como el fútbol!. ¡Me cachis!

Por si acaso, me gustaría que, aunque fuese por una vez y sin que sirva de precedente, estos muchachos trabajen todos a una -como en Fuenteovejuna- por y para el pueblo, puesto que para ellos ya han trabajado bastante y todavía les quedan, por lo menos, ¡dos años!. ¿ Miguel Ángel, cuándo se quitarán los pinos secos que quedan?. ¡Menos samba y más trabajar!. ¡Ah!, ¿sabéis que Cataluña quiere ser como Ikea?; ¡sí, por lo de República Independiente!. ¡Y yo con estos pelos!. ¡Adiós, tú!