Espejito mágico, ¿habrá alguien mas bella que yo?». Y el espejo con recochineo le contestaba a la bruja que «¡Sí, sí y sí, Blancanieves es la mas guapa!». Y en un ataque de sana - relativo a saludable- envidia montaba en cólera. Sin dejarse ver mucho, la primera reacción fue ir a la consulta de su «personal training» que la sometió a un tratamiento de estiramientos, liposucciones, rayos uva y no sé cuantos ejercicios además. Pinceladas aquí y allá, desde las uñas de los pies al cabello. Con eso la maga se fue decidida a someterse ante la luna a un segundo grado. El espejo, que además de ser mágico era cruel, le repetía con guasa: la más guapa sigue siendo Blancanieves, por mucho que tenga una perogrullada de nombre. O, como diría un presidente de Gobierno: sigue siendo la más guapa porque tiene un nombre con lo que hace falta, que es mucho sentido común. Visto lo visto en el espejo, la bruja se fue a la consulta del psicólogo. Son algo así como los decaídos confesores de antaño, pero en versión científica, de pago y postmoderna. Deben tener su aquel, porque la hechicera algo recuperó de la autoestima extraviada. Con pie firme allá que se fue la bruja a someter al cristal al tercer, y último, grado. Y el espejo que de grados no entendía nada, siguió erre que erre. «Chínchate, no eres la más guapa». Hizo añicos la luna y no la gaseó porque en estos casos no sirve de nada; y, porque igual Trump, necesitado de marcar distancias de su admirado Putin, le da por hacer respetar los dictámenes del espejo de los conflictos que es el Consejo de Seguridad.

Aunque no era fácil adivinarlo el anterior chisme viene a cuento, como habrán supuesto, de la encuesta que el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) ha publicado esta semana. Aparte de los problemas opiniones y maldecires políticos, este mes le han encargado ser el espejito de nuestra salud. Y nos dice como nos ve de salud. Nosotros nos vemos satisfechos no estamos tan mal: 7'67 puntos sobre 10. Ya quisieran otros. Con lo que más satisfechos estamos es con la vida familiar y las relaciones familiares (8'59 de media) y las relaciones de pareja (8'56). No estamos nada contentos con el tiempo libre de que disponemos que lo dejamos en el 7'59, y es que todo nos parece poco. La salud es lo más importante, dice el CIS, después de la vida familiar. No cuidamos la salud ni la mitad que la bruja: un 40%, y el 60% si es festivo, nos acostamos después de las 12 de la noche los días laborables. Levantarnos un 26% antes de las 7, y un 35% entre las siete y las ocho. Mas del 70% realizamos entre 3 y 4 comidas diarias, lo cual según los «training» no está nada mal. Nuestra alimentación es envidiable, como la belleza de Blancanieves, y muy distinta de los del «Brexit», que nos va a echar de menos. A diario, el 76% toma leche y derivados; un 69% cereales y pastas; un 63% frutas frescas, y la mitad de los españoles verduras y hortalizas también a diario. Es otra razón de peso -de pesar poco- para mantener la PAC (Política Agraria Común) de la Unión Europea. El pescado es lo que menos consumimos aunque el 60% lo prueba al menos dos veces por semana. Y, lo que es mas importante, en el 96% de los casos el condumio nos lo elaboramos nosotros casi siempre o más de la mitad de las veces. ¡Eso es autoestima culinaria! Además, un 27% de los españoles se ha quitado del tabaco y un 43% no ha fumado nunca. Esto sólo ya es un éxito.

No es oro todo lo que reluce. Hacen ejercicio físico diario (32'4%) o varias veces por semana (24'8), no hace nada una cuarta parte de la población que no pasa del telesofá, el dominó o la brisca. Nos automedicamos uno de cada tres. Hay un 5% que consideran su salud mala o muy mala. Cruzar la altura de cada cual con el peso lo han hecho los colegas del CIS para descubrir la obesidad. Esas cervezas y vinos de más. Tienen mala idea. Luego se extrañan de que rompamos el espejo, la báscula, y que proliferen los centros «fitness, healthy, beauty and gym». ¿Cómo se le ha quedado el cuerpo?