Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Antonio Sempere

En pocas palabras

Antonio Sempere

El cine sube

Acaban de hacerse públicos los datos de afluencia a las salas cinematográficas durante el año 2015, y son muy halagüeños (por cierto, en plena era de Internet, cuando todos los profesionales conocemos los datos de taquilla globales en cuestión de horas, ¿cómo es posible que este informe vea la luz ahora?). El público ha vuelto al cine. Por lo sucedido en las primeras 34 semanas de 2016 que llevamos consumidas, los datos que han de venir y que se sabrán el año próximo todavía serán más positivos.

Hasta ahí todo bien. Taquilla. Negocio. Cifras. Pero sin ánimo de querer aguar la fiesta, permítanme una breve reflexión. La gente vuelve a ir al cine, a veces en masa. ¿Pero a ver qué, a qué películas, a qué tipo de cine? Para la cuota de pantalla nacional, los Apellidos Vascos y los Apellidos Catalanes supusieron verdaderos tratamientos de choque capaz de elevar los porcentajes de un modo estratosférico. Pero, francamente, el hecho de que la mayoría de espectadores se polaricen en torno a unos pocos títulos, no modifica, en esencia, la cuestión de fondo que deseo plantear, que no es otra que la enorme carencia de cultura cinematográfica que emana del comportamiento de nuestro público. Nunca hubo tantas salas, nunca hubo tantos euros en juego, pero nunca el nivel de exigencia fue tan bajo. Que dos películas como Mascotas y Escuadrón suicida hayan marcado los dos mejores arranques del año 2016 habla bien a las claras acerca de la situación en la que nos encontramos.

Hasta ahora he hablado en términos nacionales. Descendamos un momento a Alicante y a una de sus singularidades. Habitamos en la cuarta provincia con más número de salas y con más recaudación en las mismas. Bravo. Sin embargo, desde la desaparición de los cines Astoria el cine que se distribuye solamente en versión original ha dejado de estrenarse. Maticemos este punto. Es verdad, por suerte, que en Alicante contamos con la posibilidad de ver cine de estreno en versión original. Muchos de los títulos que llegan a nuestras pantallas cada viernes pueden ser vistos, a elección del espectador, en versión doblada o en la original. Y eso ya es un triunfo. Pero basta con que conozcamos el dato de que una película no se distribuirá en versión doblada para que sepamos a ciencia cierta que no será estrenada en Alicante. Basten tres ejemplos de directores de sobrado prestigio para demostrarlo. Las filmografías del griego Yorgos Lanthimos, el canadiense Xavier Dolan o el portugués Miguel Gomes no se estrenaron en Alicante. Mientras sí lo hicieron en Madrid, Barcelona, Valencia, Valladolid, Sevilla, Málaga, Bilbao, Pamplona o Santander. Claro, todavía no se han distribuido dobladas ninguna de sus películas.

De ahí que sea tan relevante la labor del Club INFORMACIÓN, que trata de cauterizar la herida semana tras semana. Así como la Cinemateca de la CAM y la extensión de la Filmoteca en el Arniches. Sin olvidar en ningún caso la enorme labor de las salas comerciales. Que todavía siguen apostando por exhibir esos otros estrenos de enjundia. A pesar de sus recaudaciones tantas veces exiguas.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats