En un duelo a vida o muerte por la salvación, el Elche vuelve a la zona de descenso tras dejarse anoche en Granada puntos clave y el «goal average» ante un rival directo que hasta ayer era colista y sumaba 16 partidos sin ganar y cinco meses sin conocer la victoria en casa. Entre los errores propios y los ajenos -particularmente del árbitro Gil Manzano, que anuló un gol legal a Víctor y expulsó a Damián con mucho rigor-, el conjunto franjiverde volvió a salir derrotado de Los Cármenes, un estadio de mal agüero para el cuadro ilicitano. Empezó el Elche con la «torrija» y casi le cuesta muy caro en el primer minuto: Tyton tapó el 1-0 a Córdoba y el Granada se volcaba sobre el área franjiverde por uno y otro costado. Un cuarto de hora tardaron los de Escribá en asentarse, dar réplica y tomar el mando del partido. Pese a las bajas de Cisma, Fajr y Jonathas -la más sensible-, el equipo tomó el mando del partido cuando consiguió controlar a Piti y supo agruparse con orden en el centro y juntar las líneas. Es una de las virtudes tácticas de este equipo, que mantiene el orden y ocupa los espacios con independencia de las ausencias. Con Coro en punta y el joven Álvaro por la derecha, el Elche careció de la pegada de Jonathas y del buen pie de Fajr, pero sí volvió a aparecer Víctor Rodríguez. Segundos después de cabecear rozando el palo, el ínclito Gil Manzano -el árbitro que armó el taco en el Calderón- le anuló un gol legal por fuera de juego inexistente. Frente al renovado Granada de Abel Resino -nada menos que siete fichajes en el mercado invernal-, el Elche de la autarquía y la ausencia de refuerzos impuso su oficio y su sentido colectivo del juego hasta que Tyton se lió de mala manera en un centro lateral de Piti y dejó el balón muerto a los pies de Córdoba para el 1-0. No se trata de personalizar la derrota en el portero polaco, pero es desazonador que un partido igualado, con tanto en juego, se resuelva por un error individual. Como el de Damián Suárez, expulsado pocos minutos después tras una rigurosa segunda amarilla cuando ya había visto una primera absurda por protestar. Con nueve sobre el campo tras la lesión de Pasalic, capituló el Elche ante un equipo con los exfranjiverdes Rubén Pérez y Javi Márquez en el campo, además de Lass, Fran Rico, Piti, Robert Ibáñez... Calidad y cantidad; justo lo que pedía Escribá y no se lo han dado.
