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¡Pero si la igualdad ya existe!

En noviembre de 2008 el Parlamento europeo aprobó una resolución sobre la aplicación del principio de la igualdad de retribución entre mujeres y hombres en la que, entre otras muchas medidas, solicitaba a las instituciones comunitarias y a los Estados miembros que declarasen el 22 de febrero «Día por la Igualdad Salarial». La razón es que las mujeres tenemos que dedicar al trabajo un 15% más de nuestro tiempo (según los datos estadísticos entonces utilizados) para ganar lo mismo que los hombres, es decir, que debemos trabajar 418 días para igualar el salario que ellos perciben en un año, de tal manera que, para percibir el mismo salario por un trabajo de igual valor, deberíamos trabajar no hasta el 31 de diciembre, sino hasta el 22 de febrero.

Pero lo cierto es que esa fecha sólo tiene un significado simbólico, pues la brecha salarial no ha hecho más que aumentar, tanto en el conjunto de la UE como en España. Y eso sin contar con que los datos estadísticos llevan más de dos años de retraso y no todas las estadísticas están desagregadas por sexo, lo que impide visibilizar las desigualdades y, por tanto, poder adoptar medidas para eliminarlas. Aún con esas dificultades para determinar los datos con mayor exactitud, es escalofriante leer el informe que con motivo de este Día de la Igualdad Salarial ha elaborado UGT. En el mismo se señala que «con datos la última Encuesta Anual, la brecha salarial entre mujeres y hombres se situó en 2011 en un 22,99 % de media anual, por lo que las mujeres españolas tendríamos que trabajar 84 días más que los hombres para percibir el mismo salario. Las mujeres cada 4,3 años deberían haber trabajado un año más que los hombres para percibir el mismo salario por trabajos de igual valor». Utilizando, por tanto, los datos de 2011, el Día de la Igualdad Salarial se situaría en el 25 de marzo. No es difícil aventurar que, actualizándolos, nos metiésemos de lleno en el mes de abril.

Si esto ya es escandaloso, echen el cálculo del tiempo que tendrían que cotizar las mujeres para percibir la misma cuantía de pensión por jubilación que los hombres: ¡8 años y 8 meses más! Así, si actualmente son necesarios 38 años y 6 meses de vida laboral para acceder a la pensión de jubilación, las mujeres necesitarían 47 años y dos meses para percibir la misma cuantía de pensión por jubilación que los hombres.

Oigan, y todo eso, teniendo en cuenta que el tema de la intendencia doméstica y de cuidados también recae mayoritariamente sobre nosotras. Y tener que oír, un día sí y otro también, que la igualdad ya existe?

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