Todo el que viva en una urbanización en Alicante „municipio donde el modelo se ha desarrollado hasta el infinito y más allá gracias a que el clima permite disfrutar de piscinas, jardines y zonas deportivas durante varios meses al año„, coincidirá en la reflexión de que la «urba» tiene vida propia según la estación del año y no es lo mismo, por supuesto, una noche de invierno, que una noche en plena canícula, donde todo se desmadra y conciliar el sueño resulta una quimera. A los problemas típicos de la vida en comunidad en invierno.

Que si hay mucho Fernando Alonso circulando por el parking, que se juega al fútbol-sala a la hora de la siesta, que se grita mucho jugando al pádel, que si... En el verano, las molestias se multiplican, noche tras noche, por la poca urbanidad de los convecinos de la «urba». De nada sirven decenas de circulares, instrucciones de los socorristas de la piscina de turno, o los acuerdos tomados por las asambleas vecinales a las que, dicho sea de paso, acude poco más del 10% de los propietarios. La noche todo lo trastorna y suele despertar lo peor de cada vecino.

De la calma del invierno se pasa a la sucesión de cenas, sonoras a más no poder, que se prolongan hasta bien entrada la madrugada y muchas horas después de traspasar el horario oficial. Reuniones de amigos, familias en las que ni un solo papá o mamá trata de inculcar respeto a los pequeños (ni ellos mismos lo guardan), pensando en el descanso de los vecinos que al día siguiente, temprano, tienen la suerte de mantener el trabajo. Y si a eso unimos la mascota de turno aullando hasta el amanecer pues, eso, la noche en la «urba» se convierte en un infierno.

Nos alarmamos con el «balconing» de los jóvenes británicos que se estrellan contra el asfalto al saltar de balcón en balcón en sus hoteles, o con el «botellón» que practican los nuestros en cualquier parque o descampado, pero a veces el problema lo tenemos en la portería de enfrente. El calor derrite meninges y educación. Feliz verano, al que pueda disfrutarlo y que llegue pronto octubre.