Se cumplen en este año, concretamente el 9 de febrero, los 125 años de la puesta en funcionamiento, en 1888, de la primera fábrica o industria "moderna" (digna de ese nombre) en Sant Vicent. Se trataba de una fábrica de tejas y ladrillos, la conocida en la memoria sanvicentera como "El Teular de Ferrer", sita en el mismo lugar donde hoy se encuentra la Universidad de Alicante. Sus naves y hornos ocupaban aproximadamente el espacio del Colegio Mayor, aunque su actividad se expandía por gran parte del actual recinto universitario.

Esta fábrica, instalada junto a la carretera con Alicante, favorecida por la cercana línea ferroviaria y el puerto, revoluciona el sector cerámico y de la construcción, introduciendo mejoras tecnológicas avanzadas para la época, inaugura la industrialización sanvicentera, es el comienzo de su despegue económico y, al mismo tiempo, marca el final de la larga y grave crisis económica por la que atravesaba el municipio sanvicentero.

La citada fábrica, unos pocos años después, llega a superar el centenar y pico de trabajadores, sobre una población de unos 3.600 habitantes. Lo que nos da idea de su impacto sobre el tejido económico y social sanvicentero. A partir de entonces el municipio comienza un tránsito de la agricultura hacia la industria: la crisis queda atrás.

Durante buena parte del siglo XX, especialmente en las décadas de los años 40 a 70, las fábricas y talleres (fabriquetes i tallerets) se cuentan por centenares y los empleados por miles. Toda esa base industrial atrae a una importante inmigración, particularmente en la década de los años 60 del pasado siglo. Es decir, en esa época la gente viene a Sant Vicent a trabajar. Y su base industrial es con una población de aproximadamente un tercio de la actual.

En la actualidad, la situación ya no es la misma, una determinada política económica, ajena por supuesto al municipio, la globalización con la consiguiente "deslocalización" industrial ha modificado el antaño paisaje fabril sanvicentero. La principal "fábrica" es la Universidad, pero su impacto sobre la capacidad de empleo ha llegado a su punto.

A mediados de la década anterior, sobre 2003-2007, el denominado "boom de la construcción", la "burbuja inmobiliaria" hizo que se alcanzasen las casi 1.500 o 2.000 licencias de viviendas por año; algo claramente insostenible, no sólo a medio, sino incluso a corto plazo. Tras esos años, la falta de industrias ha vuelto a poner de manifiesto la debilidad del actual modelo productivo sanvicentero.

En este año 2013, 125 años después de su primera industria, la economía sanvicentera se encuentra en otra encrucijada. La desocupación ha llegado a una cifra de 7.000 parados registrados, sobre una población de 55.000 habitantes. La crisis amenaza con parecerse a aquella que eliminó la primera fábrica sanvicentera.

Teniendo en cuenta el estado actual y las perspectivas de todos los sectores económicos generadores de ocupación o empleo, directa o indirectamente, en el municipio o en el área metropolitana, ya sea la Universidad, comercio, otros servicios, industria, sector público, etc. etc. etc., una de las preguntas que se nos plantean es: ¿Dónde van a encontrar trabajo el grueso de los 7.000 parados? Por supuesto, ya sea en el término o en un radio de 50 Km. Dicho de otra manera, ¿qué sector/es podrían terminar con la crisis. Por razones de espacio, volveremos sobre este tema en otra ocasión.